Leopoldo Sandoval Villeda, in memoriam


  Para ese entonces, yo era un muchacho que comenzaba a incursionar en el campo del periodismo, me desempeñaba de reportero del desaparecido diario El Gráfico y una de mis fuentes informativas era el también extinto Instituto Nacional de Transformación Agraria.

Eduardo Villatoro
eduardo@villatoro.com

El Presidente del INTA era un ingeniero agrónomo de recia personalidad, alto, joven, atlético y amable, con quien, al correr de los años, nos encontramos en diferentes circunstancias, habiendo cultivado una lejana amistad, que se consolidó a finales de la década de los «80.

  

Mi amigo Leopoldo Sandoval Villeda ha fallecido, pero tengo la certeza de que la mayorí­a de quienes lo conocieron guardan un recuerdo agradable de su  carácter afable y de su valioso aporte en el estudio y la investigación del siempre  controvertido problema de la tenencia de la tierra y el latifundio, porque buena parte de su vida la dedicó a trabajar en esa disciplina, tanto a escala nacional como en ámbitos internacionales, pues fue Ministro de Agricultura en dos ocasiones, alto funcionario de la FAO y consultor de otras instituciones de similar envergadura, además de haber sido catedrático de la Universidad de San Carlos.

 

En 1988 -si la memoria no me falla-, cuando el gobierno del presidente Vinicio Cerezo, cumpliendo con uno de los postulados de los Acuerdos de Esquipulas, estableció la Comisión Nacional de Reconciliación -que encabezó el actual cardenal Rodolfo Quezada Toruño- y designó como representantes del Ejecutivo al vicepresidente Roberto Carpio, entusiasta centroamericanista, y a Sandoval Villeda.

 

Prudentemente, Carpio Nicolle decidió no asistir a las reuniones de la CNR, de la cual fui nombrado secretario ejecutivo, de manera que Polito, el delegado suplente del Gobierno, asumió esas funciones, juntamente con el representante alterno de la Conferencia Episcopal, el malogrado obispo don Juanito Gerardi; la escritora Tere de Zarco ( ) y el abogado Mynor Pinto (después Mario Permuth), en su calidad de Ciudadanos Notables; el que posteriormente serí­a presidente de la República Jorge Serrano Elí­as, y el coronel Francisco Luis Gordillo Martí­nez, en representación de los partidos polí­ticos de oposición.

 De esa cuenta, Sandoval Villeda tuvo una activa y valiosa participación durante las dos primeras reuniones de la CNR con la comandancia de la URNG, en San José de Costa Rica, y fue muy importante su aporte en las deliberaciones del Diálogo Nacional, sobre todo en la mesa concerniente al tema agrario. Ahora, Polito Sandoval ha vuelto a la tierra que tanto amó.

(Romualdo informa que hoy a las 18.30 horas se oficiará una misa de nueve dí­as en memoria de Polito, en la iglesia San Judas Tadeo, zona 14).