El ex dictador iraquí Saddam Hussein y dos de sus colaboradores condenados a muerte con él serán ejecutados inmediatamente después de que la Corte de Apelación confirme la sentencia y podrían ser sepultados en secreto.
Un alto funcionario del gobierno que pidió no ser identificado dijo estar seguro de que la Corte confirmará las condenas a muerte.
«Contemplamos la posibilidad de ejecutar a los tres simultáneamente el mismo día», añadió, y agregó que «es posible que se entierre a Saddam en un lugar secreto».
Precisó que «el cuerpo se entregaría a sus familiares, ya que según los ritos musulmanes, se le puede exhumar después de que esté enterrado. Pero lo que el gobierno garantizará es que no habrá mausoleo de Saddam en ningún sitio».
Saddam Hussein, su medio hermano Barzan al Tikriti, ex jefe de los servicios de inteligencia, y el ex presidente del tribunal revolucionario, Awad al Bandar, fueron condenados a la horca el 5 de noviembre pasado por la ejecución de 148 aldeanos chiítas en los años 80, en represalia por un atentado contra un convoy presidencial en Dujail, al norte de Bagdad.
El responsable iraquí dijo que la ejecución se llevará a cabo poco después de que los nueve jueves que estudian el recurso confirmen la sentencia del Alto Tribunal Iraquí.
Los nueve jueces de la Corte de Apelación no tienen fecha límite para anunciar su decisión.
«No perderemos tiempo. Tendremos en cuenta la situación de seguridad y serán ejecutados inmediatamente en la primera oportunidad, tan pronto la Corte de Apelaciones comunique su veredicto», sostuvo la fuente.
Bajo la ley iraquí, las condenas, de ratificarse, deben ser ejecutadas en los 30 días siguientes.
El mes pasado, el primer ministro iraquí, Nuri Al Maliki, dijo a la BBC que Saddam podría ser ejecutado a final de año, pero el responsable dijo que «es improbable».
El jefe de los fiscales, Jaafar Al Mussawi, dijo que la cámara «está deliberando» y «estudiando el caso en detalle diariamente, y si ratifica la condena, ésta será ejecutada por el ministerio de Justicia».
Los abogados de Saddam apelaron las sentencias.
Otro responsable del gobierno iraquí, Basam Ridha, dijo que más de cien personas expresaron su deseo de ahorcar a Saddam.
Saddam y otros seis responsables de su régimen son además objeto de otro juicio en el que son acusados de genocidio por la matanza de unos 182 mil kurdos en el norte de Irak en 1988.