El Internacional de Porto Alegre y el FC Barcelona parten como favoritos en los partidos de semifinales del Mundial de Clubes de fútbol, que disputarán respectivamente el miércoles y el jueves contra el equipo egipcio Al Ahly y el mexicano América.
El Internacional de Porto Alegre se enfrenta a Al Ahly, mañana en el Estadio Nacional de Tokio (10h20 GMT), pero no debe fiarse del mejor club africano del siglo XX.
El Inter, clasificado directamente a semifinales, como representante sudamericano en el torneo tras ganar la Copa Libertadores, quiere que siga el dominio brasileño en el Mundial, después de los triunfos de Corinthians en 2000 y Sao Paulo en 2005, mientras que Al Ahly busca mostrar el progreso africano.
El cuadro egipcio se clasificó a semifinales tras derrotar el domingo en Toyota al Auckland City de Nueva Zelanda por 2-0.
El técnico Abel Braga está ensayando estos días las jugadas con balón parado y la presión en campo del Al Ahly, un equipo que toca el balón con rapidez. Pero, si la lógica es respetada, el Inter de Porto Alegre debe imponerse al equipo africano.
«Al Ahly logró un triunfo merecido, pero defensivamente no pasó apuros. Los neozelandeses eran muy ingenuos, corren mucho pero no crean ocasiones», dijo el técnico Abel Braga.
Los dos jugadores que debe vigilar el Inter de Porto Alegre son los autores de los dos goles en el partido que los egipcios ganaron al Auckland, el angoleño Flavio y la estrella local Mohamed Aboutrika.
Por su parte, el América de México y el FC Barcelona disputan el jueves en Yokohama (10h20 GMT) una semifinal en la que el equipo azteca saldrá con la piel de cordero ante el todopoderoso FC Barcelona, auténtico lobo feroz de este torneo.
Puesto que para muchos el FC Barcelona es en este momento el mejor club del mundo, como también lo calificó el técnico de los mexicanos, Luis Fernando Tena, en la rueda de prensa posterior al triunfo en cuartos de final contra el Jeonbuk surcoreano (1-0), cualquier rival parte en desventaja.
El FC Barcelona quiere cerrar de forma brillante un año de ensueño en que ganó la Liga española, la Champions y ahora pretende hacerse con el Mundial de clubes, el único título que falta en su palmarés, ya que falló en la única ocasión que tuvo de ganar la Copa Intercontinental, en 1992 contra Sao Paulo.
Pero el América se siente bien en ese papel de víctima y espera sorprender a un FC Barcelona que, aunque ha venido sin dos de sus mejores jugadores, Samuel Eto’o y Leo Messi, lesionados, tiene suficientes jugadores para imponerse, como el brasileño Ronaldinho, que sueña desde niño con ganar la Copa Intercontinental.
El América contará con una baza psicológica favorable al tener en sus filas al argentino Claudio ’Piojo’ López, que anotó doce goles en catorce partidos frente al FC Barcelona en los cuatro años que jugó con el Valencia en la Liga española.
El defensa chileno Ricardo Rojas, autor del tanto que dio la victoria en cuartos de final al América, piensa que el papel de víctima conviene al cuadro mexicano. «Contra el Barcelona nos tocará hacer el papel de ’equipo chico’, y ahí creo que las cosas se nos pueden facilitar», señaló.