Tras los días violentos que se ha sufrido en los últimos meses, y en especial en esta semana, la población guatemalteca resintió hoy una noticia pésima: la muerte del bebé que ayer miércoles fuera alcanzado por una bala perdida en un asalto a un bus de rutas cortas.
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Anthony Josué Rosales, de apenas dos meses de nacido, recibió un balazo en un asalto a un bus de la Ruta de Canalitos a la capital, en donde también resultó muerto el piloto, y herido el ayudante.
Ante la confusión generada por el ataque, los pasajeros empezaron a salir precipitadamente, mientras los atracadores disparaban por doquier. Una bala perdida alcanzó al bebé; sin embargo, la madre no se dio cuenta, sino hasta 45 minutos después.
Fue trasladado a la Pediatría del Hospital General San Juan de Dios, en donde fue operado de emergencia; posteriormente, se trasladó a la unidad de ciudados intensivos, en donde pasó la noche con los signos vitales muy bajos.
Hoy, autoridades de la Pediatría del nosocomio anunciaron que, pese a los esfuerzos, Anthony Jousué Rosales falleció hoy miércoles por la mañana.
SECUESTRO
En otra noticia, fuentes de la Procuraduría de Derechos Humanos anunciaron que la esposa del jefe de esa institución, Sergio Morales, había sido secuestrada, en un rapto rápido, aparentemente; para hoy, ya se encuentra en un centro asistencial, verificando cualquier quebranto de salud. El Procurador ofreció una conferencia de prensa a las diez de la mañana (hora de Guatemala), para referirse al tema.
INDIGNACIí“N
Tras estas lamentables noticias, es percibibles desde ya un repudio contra la violencia y una indignación generalizada ante la imparable violencia.
En varios focos de liderazgo, se están gestando propuestas para demostrar el repudio en contra de la situación de violencia. Desde ya, se han observado listones blancos en automóviles y otros lugares públicos, que son parte de una campaña de repudio y de convocatoria por la paz.