«Hace unas horas, ha sido el Ejército mexicano el que en un operativo (…) ha detenido a Sigifredo Nájera, alias «El Canicón» (…) responsable directo de la tortura y ejecución de estos militares y de los atentados al consulado de Estados Unidos», anunció el presidente mexicano Felipe Calderón la noche del viernes.
Esta detención se consigue 48 horas después del arresto de Vicente Zambada Niebla, alias «El Vicentillo», uno de los líderes del poderoso cártel narcotraficante de Sinaloa, encabezado por el fugado Joaquín Loera «El Chapo» Guzmán.
El Ejército mexicano informó por su lado que Nájera era «responsable» del grupo de gatilleros los «Zetas» (ex militares reclutados por el cartel Golfo) en Monterrey, donde «El Canicón» habría encabezado un ataque a balazos y con una granada que no estalló al consulado de Estados Unidos la noche del 11 al 12 de octubre.
El detenido también es señalado como responsable de un atentado con granadas contra las sede de la emisora Televisa en la ciudad mexicana de Monterrey (norte), ocurrido en enero.
La detención de Nájera ocurrió durante un operativo en la ciudad mexicana de Saltillo (norte), detalló Calderón durante un acto público.
Junto con el presunto sicario, fueron detenidas cinco personas más incluida una mujer, señalada como la «administradora financiera» de la organización en Monterrey y que llevaba al momento de su captura poco más de 10 millones de pesos en efectivo (unos 700.000 dólares).
Calderón acusó a Nájera de cometer actos de «barbarie indescriptible» por la tortura y ejecución de nueve miembros del Ejército mexicano.
Además, lo acusó de ser responsable de «actos terroristas contra la sociedad» por los ataques contra el consulado estadounidense y Televisa, una de las principales televisoras en lengua hispana.
El jueves, el Ejército mexicano y la Procuraduría General dieron a conocer la captura de Vicente Zambada Niebla alias «El Vicentillo», hijo de Ismael «El Mayo» Zambada y capo de la organización del «Chapo» Guzmán.
«El Vicentillo» se dedicaba al «control de la estructura operativa, logística y seguridad» a favor del cártel de Sinaloa y había sustituido a Alfredo Beltrán Leyva «El Mochomo», quien fue detenido a principios de 2008, «posicionándose en la estructura delictiva al mismo nivel de Joaquín Loera Guzmán», dijo el jueves el subjefe del Estado Mayor de la Defensa Nacional, Luis Arturo Oliver.
Desde diciembre de 2006, el gobierno de México mantiene un operativo contra el narcotráfico en el que participan más de 36.000 militares, destacados principalmente en la zona norte del país, donde los carteles de la droga se disputan el control de las rutas hacia Estados Unidos.