La población comienza a defenderse de ola criminal


Trabajadores del Ministerio Público trabajan dentro de un autobús donde fallecieron dos presuntos asaltantes.

En los últimos dí­as la población ha decidido tomar la justicia por sus manos, y los asesinatos y los linchamientos son la respuesta de los guatemaltecos ante esta situación.

Mariela Castañon
lahora@lahora.com.gt

Ayer fueron ultimados a balazos, en el kilómetro 13.5 y calzada Roosevelt, dos hombres sindicados de asaltar un bus de la Ruta 10 de Mixco, quienes despojaban a las personas de sus pertenencias aprovechando que la unidad iba llena.

Sin embargo, un pasajero al notar lo que sucedí­a arremetió contra ellos, hasta matarlos. Según el relato de una testigo, la gente le pidió a gritos acabar con estas personas.

El martes recién pasado fueron linchados tres hombres en la zona 9 de Huehuetenango, éstos fueron identificados como Vinicio Efraí­n, de 28 años; Marcely Wosbely Gómez, y otro no identificado, a quienes obligaron a bajarse del vehí­culo en el que se conducí­an para golpearlos.

Vecinos del lugar incendiaron el automóvil, posteriormente lo lanzaron a un rí­o, mientras que a los acusados los llevaron a otro lugar, los torturaron y a uno le quitaron las manos, después los quemaron.

La población manifestó que las ví­ctimas eran los responsables de robar motocicletas en ese lugar, por lo que decidieron seguirlos y determinar la forma de cometer los ilí­citos.

El lunes también se registró otro asesinato dentro de un bus extraurbano que se conducí­a a Quetzaltenango, en el kilómetro 18 de la ruta Interamericana; el resultado fue un presunto delincuente muerto, quien según versiones de testigos, atacó la unidad con la intención de despojar a los pasajeros de sus pertenencias, pero un pasajero repelió el ataque y se dio a la fuga.

Según el procurador de los Derechos Humanos, Sergio Morales, la falta de garantí­as de protección hace que la población actúe de esta manera, ante la violencia e inseguridad que los aqueja.

De acuerdo con el Magistrado de Conciencia, la situación es preocupante, debido a que sólo demuestra una anarquí­a total.

La Liga de Higiene Mental refiere que no se trata de que la población esté «enferma», sino todo lo contrario, esto se da en respuesta al entorno en el que vive.

Marco Antonio Garavito, representante de la institución, señala que «nadie nace violento, sino que se hace violento», por las condiciones en las que se desenvuelve lo hacen actuar de esa forma.

Por lo que es necesario exigir a las autoridades que proporcionen la seguridad necesaria para vivir en paz y evitar que esta ola de violencia se propague como hasta ahora, ya que por ningún motivo la población debe actuar de esta forma y menos acostumbrarse a vivir con dicha problemática, que únicamente crea un ambiente de insensibilidad.

«Nadie nace violento, sino que se hace violento; por las condiciones en las que se desenvuelve lo hacen actuar de esa forma».

Marco Antonio Garavito

psicólogo