El Dúo Terwey se presentará en dos recitales en Guatemala de piano y violí­n, como parte del Festival Internacional Bravissimo 2009 de la Organización para las Artes de la Universidad Francisco Marroquí­n.

El primero concierto se llevará a cabo en el Auditorium Juan Bautista Gutiérrez (6a. calle final, zona 10, Universidad Francisco Marroquí­n), mañana a las 19:30 horas. El segundo recital tomará lugar en Casa Popenoe, La Antigua Guatemala (6ª. calle Oriente No. 16), el sábado 14 de marzo a las 17:00 horas.

Para los recitales del Dúo Terwey, dos reconocidas artistas de la plástica tomarán parte en Guatemala y en La Antigua. Son ellas la pintora Ingrid Klussmann, con su instalación «Paso a Paso por el Paí­s de la Eterna la Eterna Primavera» en el vestí­bulo del Auditorium, y Maggie de Bickford, cuya exposición de obra religiosa en porcelana y recubrimiento en plata, podrá admirar en el recinto barroco guatemalteco, Casa Popenoe.

PERFIL

El dúo está compuesto por las hermanas Berenice y Philomela Terwey. Nacidas en Seúl, Corea, pasaron su infancia en Alemania, donde principiaron a tomar clases de sus respectivos instrumentos a los cuatro años de edad. Hijas de un artista de la plástica, desde su tierna infancia fueron introducidas al mundo de la música.

Entre las estaciones por las que hasta ahora han pasado, cuentan pretigiosas instituciones como la Laeiszhalle de Hamburgo, la Tonhalle de Zurich y de Dusseldorf, la Musikfestwochen de Lucerna, el Concertgebouw de ímsterdam, los grandes festivales de Salzburgo y de Lucerna, el Festival Semana Musical Llao Llao de Argentina, el Gewandhaus de Leipzig, la Filarmónica de Much y otros muchos en Europa.

Berenice estudió violí­n con Davina van Wely, una discí­pula de Georges Enescu, en el Conservatorio de Amsterdam. Berenice se manifestó muy precozmente con singular talento musical que fue cultivado con todo esmero. Adicionalmente, es la bachiller más jóven la historia de Alemania.

Philomela estudió piano en la clase de Homero Francesch en Zurich y con Dame Moura Lympany. Recibió clases magistrales y un gran impulso a su carrera de Paul Badura-Skoda e Ivonne Loriod-Messiaen, en Parí­s.

Las hermanas Terwey denotan una perfecta sí­ntesis de su arte en el sentido estético, una rara unidad espiritual, el esplendor de un cromatismo auditivo y unas dimensiones de sonido delicadamente ajustadas, una técnica de primera clase, y la más profunda expresividad.