El Nobel de Literatura 1998, José Saramago, se expresó emocionado el lunes de conversar con el colombiano Sigifredo López, liberado por la guerrilla de las FARC tras casi siete años de secuestro, y quien una vez en libertad hizo alusión a una novela del escritor portugués.
«Espero que además de la alegría de haber recuperado la libertad y de que pueda seguir viviendo con su familia, podamos llegar a conocernos y coincidir para que pueda abrazarlo, estrecharlo en mis brazos», dijo Saramago a López en conversación telefónica a través de la emisora RCN de Bogotá.
El pasado 5 de febrero, tras recuperar su libertad, López comparó a uno de los personajes de la novela de Saramago «Ensayo sobre la ceguera» con la senadora colombiana Piedad Córdoba, quien gestionó ante las FARC su liberación y la de otros cinco rehenes.
«Cuando sin que yo pensara que eso pudiera ocurrir, él hace esa referencia del Ensayo sobre la ceguera, pues entonces eso me ha tocado en el corazón, en el alma, donde quiera y la verdad que no he podido hacer nada más que desahogarme con mi mujer», recordó Saramago sobre el momento que vivió.
«Yo he llorado a lágrima viva y por eso intenté comunicarme inmediatamente con Sigifredo para expresar mi gratitud, y aquí está a miles de kilómetros de distancia entre Colombia y Canarias, y nos hemos acercado unos a otros con una emoción muy fuerte», agregó el escritor portugués.
Para el escritor, la alusión de López a su novela lo reconforta. «En el momento en que eso ocurrió yo sentí justificada mi existencia como persona y como escritor», señaló.
Según Saramago, «uno va construyendo sus personajes para que se queden, unos más que otros menos en la memoria del lector, pero que en la situación concreta en que se encontraba Sigifredo hubiera leído eso en esa novela, y que lo haya impresionado tanto, es que ha sentido el mensaje que la novela quiere comunicar», dijo.
Saramago aseguró que «si vamos a Colombia, y lógicamente lo haremos, vamos a estar seguramente con Sigifredo y con esa mujer extraordinaria que se llama Piedad. Espero que eso ocurra y para mí y mi mujer será un placer enorme», concluyó.