El ex vocalista del grupo chileno La Ley, Beto Cuevas, está finalmente presentándose solo en Estados Unidos, donde dos temas de su primer disco «Miedo Escénico» son éxitos radiales en ciudades latinas, entre ellas Los íngeles, donde vive, produce y prueba en la actuación.
«Definitivamente me tomé mi tiempo. No tenía apuro de salir de inmediato a sacar un disco», contó Cuevas en Los íngeles.
Desde que en 2005 La Ley puso punto y final a más de 15 años de carrera en conjunto con logros internacionales, varios medios especializados anunciaron el arribo inminente de Beto Cuevas como solista, pero «Miedo Escénico» salió en Sudamérica recién en septiembre 2008 y este mes en Norteamérica.
«No había prisas y necesitaba mucho vivir otra cosa, ir por otras experiencias, tenía la seguridad que aunque eso significara decrecer en popularidad, perder ciertas cosas, tenía que permitirme este plazo sin fecha», apuntó el productor de un álbum de rock-pop repleto de melancolía.
Los temas «Vuelvo» y «Háblame» son dos de los sencillos que pegaron en las radios hispanas de ciudades como Los Angeles y Miami y que preparan el camino para que el primer disco sin La Ley de Cuevas se consolide para el próximo verano boreal, cuando piensa emprender una nueva gira de conciertos por Estados Unidos.
Para este álbum concebido en el estudio del propio cantante en Los Angeles (California, oeste), Cuevas fungió de cantante, compositor, músico y productor.
«Me muevo en el género del rock, pero el género del rock es bastate amplio porque no soy Metallica, aunque a veces me gusta lanzarme un rock denso, pero me gusta mucho mezclar con melodías».
«La melancolía es parte de mi vida y la cultivo también artísticamente porque hay un gran sentido estético en ella, en los sentimientos que trae una canción melancólica y me siento completamente identificado con esa corriente», comentó el cantante.
En cuanto a una eventual reunión de La Ley, Cuevas no lo descartó si se da como en otros grupos: «De juntarse para pasarlo bien, para rememorar esa etapa juntos, claro que sí», dijo aclarando que aún es muy pronto para ese plan.
Enfatizó que esa posibilidad existe porque la agrupación «nunca se peleó: Nunca tuvimos una relación mala ni nos mandamos «a freir monos», ni nada por el estilo».
Y en cuanto a la actuación recordó que para él desarrollar ese arte «no es un capricho, es parte de lo que me inquieta artísticamente explorar y la verdad es que en la medida que siga teniendo la posibilidad de hacerlo, lo haré».
«Lo bonito que tiene el ejercicio de la actuación es poder caminar en zapatos ajenos», dijo el cantante que busca personajes que lo desvinculen de su alterego de roquero y por estos días revisa un guión para una película hollywoodense y otra latinoamericana -«sin más detalles-, advirtió.