Un avión militar iraní se estrelló al despegar hoy de Teherán, provocando la muerte de al menos 36 ocupantes, nuevas víctimas de una serie de accidentes debido a la vetustez de la flota civil y militar del país.
«Treinta miembros de los Guardianes de la Revolución y seis tripulantes se convirtieron en mártires y dos personas quedaron heridas», según un comunicado de los Guardianes de la Revolución leído en la televisión estatal.
De acuerdo con la televisión, el aparato de origen ruso, un Antonov 74, viajaba a Shiraz (sur) y se estrelló al despegar del aeropuerto internacional de Mehrabad, situado en pleno centro de Teherán.
El jefe de los Guardianes de la Revolución, el general Yahya Rahim Safavi, no descartó en un primer momento la hipótesis de un atentado, pero luego afirmó que no había que «prejuzgar sobre la causa del accidente antes del fin de la investigación».
«El avión se estrelló en un extremo de la pista del aeropuerto de Mehrabad a las 07H12 locales (03H42 GMT). Luego se incendió, pero la causa del accidente no es muy clara. Hay que ubicar la caja negra del avión», afirmó por su parte el comandante Ahmad Hagh Talab, responsable de los Gardianes de la Revolución para la seguridad de los aeropuertos.
Según un comandante de la policía, el general Eskandar Momeni, «el avión se estrelló luego de que uno de sus motores se detuvo».
Momeni precisó que 39 personas murieron en este accidente, pues «tres heridos fallecieron durante su transporte al hospital».
El aeropuerto de Mehrabad es de uso civil y militar.
La flota aérea civil y militar de Irán está en un estado crítico debido a su vetustez y a la falta de manutención, debido al régimen de sanciones estadounidense.
Este prohibe la venta a compañías estatales iraníes o al Estado de aparatos estadounidense Boeing, o Airbus, filial del grupo europeo EADS, cuando tienen una parte significativa de componentes de origen estadounidense.
No obstante, Estados Unidos decidió recientemente autorizar las ventas de repuestos, pero sólo para los aviones civiles iraníes.
El régimen de sanciones unilaterales fue impuesto en los años 1980, después de la revolución islámica de 1979 y la toma de rehenes en la embajada estadounidense en Teherán.
En los últimos meses, Irán sufrió una serie de accidentes de aviones militares y civiles.
El 18 de noviembre pasado, seis personas murieron al estrellarse un helicóptero militar de entrenamiento cerca de la ciudad de Najafabad, en el centro de Irán.
El 1 de septiembre, 29 personas murieron y 43 quedaron heridas en el accidente de un avión iraní que se incendió al aterrizar en Machhad, al noreste.
En enero pasado, 13 personas, entre las cuales se encontraban oficiales de alta graduación de los Guardianes de la Revolución y el comandante Ahmad Kazemi, jefe de la fuerza terrestre de este cuerpo, murieron cuando se estrelló un avión militar en el noroeste de Irán.
En diciembre de 2005, un Lockheed C-130 del ejército, comprado en Estados Unidos antes de 1979, se estrelló en un suburbio de Teherán después del despegue, muriendo su 108 ocupantes, en gran parte periodistas.
Las fuerzas armadas iraníes utilizan viejos aparatos militares estadounidenses, así como aviones rusos.