Fernando Ramos

Cada tanto tiempo aparece una de esas pelí­culas que muestran que el cine es fantasí­a, que a pesar de lo duro de la vida siempre hay puntos sobre los que puede anclarse la esperanza y que la suerte también juega, rara vez, pero lo hace.

Entre los filmes que compiten por los premios de este año, con repartos poblados por Angelina Jolie, Penélope Cruz, Meryl Streep, Kate Winslet, Leonardo DiCaprio, Tom Cruise, Brad Pitt, Sean Penn, a quienes se agradece el esfuerzo, aparece la cinta de Danny Boyle, Slumdog millionaire; modesta, sin nombres famosos, realizada con un presupuesto que no llega a los veinte millones de dólares; pero con el suficiente talento para hacer de una historia que no sale de lo común, un producto brillante.

Jamal, un joven hindú, habitante de Mumbai, ha tenido que luchar toda su vida para apenas sobrevivir. Muy pequeño conoce a Latika, quien vive en las mismas condiciones, se enamora de ella y ese sentimiento lo impulsará, años más tarde, a buscar participar en la versión hindú del programa ¿Quieres ser millonario?

Se trata de un sólido ejercicio fí­lmico, en donde la acción discurre en diferentes planos, y las imágenes proyectan elementos del pasado y el presente, a veces sobrepuestas, caóticas, confiriendo ritmo trepidante al metraje.

El mayor acierto del filme reside en la forma de contar la historia, en el más puro estilo del cine made in Bollywood, pero con ingredientes adicionales que lo dotan de inusual originalidad.

Lo que se muestra en pantalla no es ajeno a la realidad latinoamericana, de hecho hay puntos de contacto con Ciudad de Dios. La fuerza de las imágenes se nutre de la violencia y desolación que trasmiten los escenarios y las situaciones, de eso hay mucho; sin embargo, la magia de los momentos especiales se impone.

Slumdog millionaire, ha cosechado buena cantidad de premios esta temporada, incluyendo los cuatro Globos de oro a los que estaba nominada, quizá también ganará el Oscar; pero no es por los premios que merece ser vista, es porque constituye un baño de frescura, una propuesta atrevida, es cine que mezcla realidad con fantasí­a, con situaciones inverosí­miles; pero no importa que haya una posibilidad en varios millones de que algo así­ suceda, esas son consideraciones que no vienen al caso; lo importante aquí­ es el logro artí­stico del director y el elenco, que sin tener actuaciones sobresalientes consigue el equilibrio necesario para mostrar lo que la historia demanda.

Es una pelí­cula que no se debe pasar por alto, ojalá llegue pronto a las carteleras locales.

Protagonistas: Dev Patel, Freida Pinto, Madhur Mittal, Anir Kapoor.

Calificación 10/10

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