La primer vacuna preventiva contra el cáncer de cuello de útero, Gardasil, destinada principalmente a adolescentes y pre púberes, ya está a la venta en Francia.
La vacuna Gardasil, comercializada por Sanofi Pasteur MSD, protege contra las infecciones causadas por los papilomavirus. Estos virus transmitidos durante las relaciones sexuales pueden provocar cánceres de cuello de útero y lesiones pre-cancerosas del aparato genital femenino.
Cada año en Francia se detectan cerca de 3.400 cánceres de cuello de útero, y más de mil mujeres mueren por esta causa.
«La vacuna tiene su eficacia máxima cuando se aplica antes del primer contacto con el virus», explicó a la AFP el doctor Yann Leocmach, del laboratorio Sanofi Pasteur MSD.
«Nuestra recomendación sería vacunar a las jóvenes de entre 11 y 12 años y dar un refuerzo entre los 13 y los 26 años», añadió.
Para el doctor Patrice Lopes, presidente de la Sociedad Francesa de Ginecología, el blanco prioritario se ubica entre los nueve y los 13 a 14 años, aunque los padres corren el riesgo de ser «reticentes a la idea de hablar de relaciones sexuales» a niñas y jovencitas de estas edades.
«Si realmente queremos ser eficaces, debe darse (la vacuna) antes de la primera relación sexual. Sobre todo a esa edad se responde bien a los anticuerpos», explicó.
Gardasil es comercializada al público a un precio de 145,94 euros la dosis. Se administra por vía intramuscular, en tres dosis (la segunda dos meses después de la primera inyección, la tercera seis meses después).
Inicialmente, la vacuna no será reembolsada por el Estado francés.
«Existe un plazo administrativo que no puede comprimirse» para definir las recomendaciones de vacunación y las condiciones de un eventual reembolso, explicó el laboratorio.
Gardasil tiene como blanco los papilomavirus de tipos 6, 11, 16 y 18, que serían responsables del 70% al 84% de los cánceres de cuello de útero, del 70% de las lesiones pre-cancerosas, del 50% de las lesiones potencialmente pre-cancerosas de la vulva y de la vagina y del 90% de las verrugas genitales.
Los tipos 16 y 18 «son los virus más peligrosos», explicó Lopes. «Estos son los que provocan la mayoría de los cánceres», advirtió. Aunque la vacuna no garantizará un 100% de prevención, «es un gran progreso», estimó.
La vacuna podría ser también eficaz en el combate contra el tipo 31 de papilomavirus.
Sin embargo, la vacuna no debe modificar las medidas de precaución adoptadas contra las enfermedades sexualmente transmisibles, y no sustituye la necesidad de que las mujeres que mantienen relaciones sexuales se sometan de manera rutinaria a una citología exfoliativa del cérvix, advierten los médicos.
«Hay que continuar la protección y continuar la detección. Si ahora se vacuna a las jóvenes de entre 9 y 14 años, recién tendremos eficacia en términos de prevención de enfermedades dentro de 10 a 20 años», señaló Lopes.
Al ser interrogado sobre la duración de la eficacia de la vacuna, Leocmach indicó que la perspectiva «es a cinco años». «Confiamos en esa duración, pero estamos realizando estudios para determinar si es necesario un eventual refuerzo» de la vacuna, añadió.
Un laboratorio competidor, GlaxoSmithKline, también puso a la venta una vacuna contra los papilomavirus de tipo 16 y 18, bautizada Cervarix. La solicitud de autorización de venta al público fue presentada ante la Agencia Europea del Medicamento (EMEA).
«Esperamos que esté disponible en el primer semestre de 2007, al menos en Francia», precisó un portavoz del laboratorio a la AFP.