Avanzando hacia el pasado


En quien se beneficia, recae la malicia

Refrán popular

Dama con suerte, la novia de Fernando Barillas, vocero de la Presidencia de la República, quien además de carro tiene seguridad del Estado. Eso justificarí­a para el Gobierno el aumento al presupuesto, lo mismo que los 12 millones en sonajeros, la comida que no se entrega en las escuelas abiertas…

Edith González

Así­ las cosas, los extorsionistas de choferes del transporte público siguiendo los pasos de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia, solicitaron ya su bono navideño, y se dice que están pensando también en cobrar su bono de riesgo y seguro de vida.

Claro, ante los 5,100 homicidios y los 13,149 ilí­citos, 1983 delitos más que en el 2007, expresados y aceptados por Francisco Jiménez, ministro de gobernación, ¿quién no se siente inseguro? Más si, como dice, sus planes son de mediano y largo plazo. Para que funcionen ¿cuándo? En el 2025 y 2050. Confirmando lo dicho por el presidente Colom al expresar que desde que falleció el ministro Gómez no se han puesto en marcha nuevos planes contra la delincuencia.

¿Estarán, entonces, combatiendo la delincuencia con inteligencia o haciendo la inteligencia de la delincuencia? Si con 10 meses de escuela los policí­as no pueden con los delincuentes, ¿con seis meses…? ¿Avanzaremos sólo a contratar personal?

¿Después de 12 años, todos pensarí­amos que el equipo de trabajo estaba completamente listo y preparado? Pero según parece hay que tener paciencia, guardar la esperanza, y hacer la cola para solicitar servicio de seguridad personal, ya que a decir del vocero de Gobernación, cualquiera puede solicitarla. Que se la den es otra cosa, aunque quizás le asignen uno de los 1215 nuevos agentes, que le ayude a prevenir un asalto o aunque sea echarse el show ante los cuates.

Mientras, se culpa a los conductores de desesperados luego de hasta siete horas de paro por bloqueos de carreteras que les hacen perder recursos esperando que la policí­a se presente a desalojar a los manifestantes revoltosos, no a los apoyadores por supuesto, aunque estos también detengan el desarrollo del paí­s.

Entre tanto, el presidente Colom acusa a los gobiernos anteriores, buscando con sus acciones? o sin ellas, parecérseles o superarlos, en corrupción, malos manejos, compadrazgos, inseguridad, carestí­a de la vida, escasez de empleo, pobreza, delincuencia, violencia, falta de medicinas, pésimo estado de las carreteras, mala calidad escolar, feminicidios, narcotráfico. Ostentando el primer lugar en violencia de los paí­ses en paz con pésimos í­ndices de desarrollo económico y humano.