Avances en la integración del sistema de inteligencia


Durante el mes de octubre, el presidente Colom anunció la integración del Consejo Nacional de Seguridad, al mismo tiempo nombró al primer Secretario de Inteligencia de Estado, para dar cumplimiento a lo establecido en la Ley Marco del Sistema Nacional de Seguridad sobre la creación del Sistema Nacional de Inteligencia que será el ente encargado de coordinar todas las actividades de inteligencia que se realicen en el paí­s.

Elisabeth ívalos

El nombramiento del primer Secretario de Inteligencia de Estado -SIE- recayó en la persona de Manuel de Jesús Galeano, anterior Secretario de Análisis Estratégico, institución que desaparece para dar paso a la SIE. Ahora, este funcionario tendrá en sus hombros avanzar en el proceso de transformación de los servicios de inteligencia del paí­s que forman parte del Sistema Nacional de Inteligencia -SIN-.

El SIN deberá estar integrado por la SIE, quien lo coordina, la Dirección de Inteligencia Civil del Ministerio de Gobernación, la Dirección de Inteligencia del Estado Mayor de la Defensa Nacional, del Ministerio de la Defensa Nacional; y las unidades de análisis e información de otras dependencias del Estado, que a requerimiento del Consejo Nacional de Seguridad deban crearse o proporcionar información, con su autorización y supervisión, según mandato del artí­culo 24 de la Ley del Sistema Nacional de Seguridad.

El proceso de creación del Sistema Nacional de Seguridad en Guatemala ha sido largo, iniciando con un proceso de discusión teórico a partir de las nuevas tendencias de la seguridad democrática. Discusión que se inició hace unos ocho años. Hasta el momento hemos avanzado en la concreción de la Ley del Sistema Nacional de Seguridad, que es el gran paraguas que debe regular el funcionamiento de un todo coordinado. Toca ahora buscar los mecanismos de implementación de esa institucionalidad que mandaba la nueva Ley.

El establecimiento del Sistema Nacional de Inteligencia, como parte de la implementación de esta institucionalidad, ha ido avanzado poco a poco. Primero se creó la Dirección de Inteligencia Civil del Ministerio de Gobernación, que inició formalmente sus labores en el año 2007, a pesar de haberse creado desde el año 2005.

Ahora, se establece la Secretarí­a de Inteligencia de Estado que deberá tener como prioridad cumplir con una de sus funciones más importantes, la coordinación del Sistema Nacional de Inteligencia que tiene una serie de atribuciones básicas para la concreción de la seguridad democrática en el paí­s.

Estas atribuciones del Sistema Nacional de Inteligencia, según lo mandaba la Ley del SNS son: a) Integrar y proporcionar la información estratégica que sirva de base para la elaboración y ejecución de la Polí­tica Nacional de Seguridad y de la Agenda Estratégica de Seguridad. b) La preparación y formulación de la Agenda Nacional de Riesgos y Amenazas. c) Elaborar el Plan Nacional de Inteligencia. d) Seguimiento y evaluación permanente de la Agenda Nacional de Riesgos y Amenazas y del Plan Nacional de Inteligencia. e) Orientar la cooperación y el esfuerzo interinstitucional de inteligencia y contrainteligencia. f) El informe periódico de la situación de inteligencia al Consejo Nacional de Seguridad. g) Orientar y coordinar la búsqueda de información estratégica, relacionada con la situación nacional e internacional.

Es decir que, el camino por andar todaví­a es largo, pues actualmente se está en un proceso de consolidación de la Dirección de Inteligencia Civil del Ministerio de Gobernación y se está iniciando la implementación de la nueva Secretarí­a de Inteligencia Estratégica de Estado, que corre con la necesidad de dejar de lado viejas atribuciones que tení­a la SAE para establecer uno de los activos más importantes que la Ley del SNS le atribuye, la coordinación del SIN.

Debemos estar pendientes de los avances que muestre la nueva SIE en los próximos meses, para su evolución interna y consolidación como una nueva institución de Inteligencia, pero también del liderazgo que adopte o no, para cumplir con su función de coordinación.

Pero aún más, hay que estar atentos de cómo se establece los mecanismos de coordinación entre instituciones de Inteligencia del Estado. De cómo crea los espacios de discusión para cumplir con las atribuciones que la Ley manda al SIN y que serí­an punta de lanza para fortalecer el Sistema Nacional de Seguridad.

La pauta para iniciar el trabajo está marcada en la Ley. Solamente falta la voluntad polí­tica de las instituciones que pertenecen al Sistema Nacional de Inteligencia para fortalecerlo.