Rebelión se retira


Unos desplazados del Congo (Roberto Schmidt AFP-La Hora).

La rebelión congoleña inicia retirada para «dar una oportunidad a la paz».


Los rebeldes del lí­der congoleño tutsi Laurent Nkunda iniciaron una retirada unilateral de algunos frentes para «dar una oportunidad a la paz» en el este de la República Democrática del Congo (RDC, ex Zaire), donde infligieron duros reveses al ejército regular.

Tal como lo habí­a anunciado ayer, los rebeldes «se están retirando de numerosas localidades», declaró el portavoz militar de la Misión de la ONU en el paí­s (MONUC), el teniente coronel Jean Paul Dietrich.

«El proceso se está llevando a cabo» y los cascos azules de la ONU «patrullan la región y observan la retirada» de tropas rebeldes, indicó la misma fuente.

Las tropas se retiraban de los ejes Kanyabayonga-Nyanzale y Kabasha-Kiwanja, de frentes ubicados a unos 80 km al noreste y al norte de Goma capital provincial de Kivu Norte, pero no del frente más sensible, es decir el que está ubicado a 15 km de Goma, ciudad de medio millón de personas.

«Del eje Kanyabayonga-Nyanzale, ya se retiraron hasta Kikuku» a unos 30 km, precisó el portavoz militar de la MONUC.

«La retirada comenzó ayer. Nos hemos retirado de 40 km», declaró el portavoz de la rebelión, Bertrand Bisimwa, interrogado telefónicamente desde Kinshasa.

Ayer, los rebeldes que responden al Congreso Nacional para la Defensa del Pueblo (CNDP) de Nkunda, anunciaron la retirada para «darle una oportunidad a la paz» y respaldar la labor mediadora del emisario de la ONU en la RDC, Olusegun Obasanjo.

La rebelión habí­a pedido a la MONUC que se «hiciera cargo de la seguridad de estas zonas de separación y que se asegurara que ninguna otra fuerza las ocupaba». «Semejante ocupación anularí­a inmediatamente la decisión de retirada», habí­a advertido el CNDP.

Tan sólo unas horas después del movimiento de las tropas, la rebelión acusó al ejército regular, a milicianos Mai-Mai -que combaten junto al ejército- y a rebeldes hutus ruandeses de haber tomado posiciones en las zonas evacuadas.

«Miembros de FDLR (rebeldes hutus ruandeses) y de las FARDC (ejército regular congoleño) se han instalado en Vitshumbi», pequeño puerto a orillas del lago Eduard, según Bisimwa.

«Los Mai-Mai están avanzando hacia Kiwanja desde la localidad de Kinyandoni», una veintena de kilómetros más al norte, añadió.

El teniente coronel Dietrich indicó que hoy está prevista una reunión entre responsables de la alta jerarquí­a militar de la MONUC, del CNDP y del ejército regular congoleño para analizar asuntos prácticos para «poner en marcha (la retirada) y la desmilitarización de la zona».

Hoy al mediodí­a, la MONUC no habí­a hecho ningún comentario sobre las acusaciones del CNDP, que podrí­an poner en tela de juicio el primer signo favorable en el terreno desde la visita el fin de semana que el enviado especial de la ONU hizo a Kivu Norte.

Obsanjo se reunió con Nkunda y obtuvo de su parte el compromiso de respetar el alto el fuego proclamado unilateralmente el 29 de octubre por la rebelión, pero que quedó en papel mojado.

La calma volvió hoy a la región estratégica de Kanyabayonga (100 km al norte de Goma), controlada por el ejército regular y que cierra el acceso al norte de la provincia, tras los enfrentamientos de ayer entre milicianos Mai-Mai y el ejército.

Al menos dos Mai-Mai murieron en el conflicto, se constató en Kirumba, ciudad desierta de habitantes en las que muchas casas han sido objeto de pillaje.

En el plano diplomático, Francia, que ostenta la presidencia de turno de la Unión Europea (UE), reafirmó la necesidad de reforzar la MONUC, tras haber propuesto el lunes al Consejo de Seguridad de la ONU que aumente en poco más de 3 mil hombres los efectivos de la fuerza onusiana en la RDC, que cuenta con unos 17 mil cascos azules, que constituyen la más importante misión de paz de Naciones Unidas desplegada en la actualidad.