Brasil no decepcionó en su condición de favorito y de local, al llegar sin ningún problema y sin dejar ni un solo punto a la gran final del Mundial de Futsal.

Hoy debieron vencer, por segunda vez en el torneo, al disciplinado equipo ruso, que complicó más el partido y vendieron cara su derrota.

Rusos y brasileños ya se habí­an enfrentado en la ronda clasificatoria de grupos; en esa oportunidad, los locales tuvieron mayores facilidades para vencer sin mayores sobresaltos. Sin embargo, Rusia se aplicó más para esta semifinal.

En un inicio, Rusia planteó de forma diferente el partido. Buscó la posesión del balón y, cuando no lo tuviera, presionar desde la salida al equipo brasileño. Pero Brasil, que ha sido favorito todo el torneo, no se dejó intimidar mucho, y demostró que sabe disciplinarse cuando se ven acosados.

El brasileño Schumacher se sacudió la presión rusa al anotar a los 3 minutos 45 segundos. Todo surgió de un robo de balón de su compañero Lenisio, cuando Rusia estaba «acaramelada» con el esférico.

Rusia parecí­a no dejarse vencer, y continuó presionando. Pero, Brasil aprovechó la desesperación del rival. Fue el quinteto «canarinho» el que empezó a presionar la salida de los rusos, lo cual trajo consecuencias, ya que Vinicius logró robar un balón en área rival, y se lo dejó servido a Falcao, quien puso dos goles de distancia antes del minuto 8.

Rusia insistí­a en tener la posesión del balón la mayor parte del tiempo, lo cual empezó a tener frutos. Pula, pasados los 17 minutos, logró vencer al meta Tiago. Los rusos respiraban nuevos aires, y creí­an que el partido estaba al alcance.

Pero poco duró la alegrí­a, ya que un minuto más tarde, el brasileño Ari buscó un balón que parecí­a perdido, y ante la sorpresa de esta recuperación, los rusos estaban mal parados. Ari centró y Vinicius, sin mayor marca, logró rematar de cabeza y poner el marcador 3 a 1, gol que serí­a suficiente para acceder a la final.

El primer tiempo concluyó 3 a 1. Ante la necesidad de ganar, los rusos salieron con todo en la reanudación. Brasil, por su parte, salió a defender la diferencia. Algún apuro tuvieron cuando el ruso Khamadiev logró acercarlos al minuto 26.

Los rusos de nuevo estaban a un gol de empatar, pero en los minutos siguientes fueron más moderados, para evitar una nueva anotación brasileña. Sin embargo, a falta de cinco minutos, Rusia cambió de actitud y se fue con todo.

Pero la estrategia no funcionó, porque Brasil supo soportar y contratacar, con lo cual pusieron cifras finales, 4 a 2, con gol de Gabriel a dos minutos del final. Brasil irá, así­, a la final, para buscar su cuarta corona mundial. Sin embargo, desde hace doce años que se le niega este tí­tulo.

* Con información de www.fifa.com