Tres dí­as de festejos en un castillo para la boda de Cruise y Holmes



La boda del año entre las estrellas de Hollywood Tom Cruise y Katie Holmes durará tres dí­as, del 16 al 18 de noviembre, y se celebrará en un castillo italiano sobre el lago de Bracciano, a unos 30 kilómetros de Roma, sin sacerdote, ni representante del Estado, aseguran el viernes varios medios de comunicación italianos.

   «No me han pedido nada hasta ahora y si el matrimonio no lo oficia un alto funcionario público, como el alcalde, no es válido en Italia. Pero como son extranjeros me pueden convocar en el último momento si tienen los documentos necesarios», aseguró a la AFP la alcaldesa de Bracciano, Patrizia Riccione.

   La pareja celebrará su boda el 18 de noviembre al parecer en el elegante Castillo Odescalchi, a orillas del lago de Bracciano, en una fortaleza rodeada de jardines, cuyos alrededores han sido invadidos por fotógrafos de medio mundo.

   «No tenemos confirmación de que la boda se vaya a celebrar aquí­. Nadie nos ha contactado. Por ahora han venido sólo periodistas y fotógrafos», comentó la alcaldesa, que decidió de todos modos preparar la pequeña localidad para la llegada de la crema y nata del mundo del espectáculo estadounidense.

   El representante del actor anunció a finales de octubre que Cruise y Holmes «se casarán el 18 de noviembre en Italia», sin especificar el lugar, lo que ha movilizado a la prensa especializada en asuntos de corazón, que asegura que se darán el ’sí­ quiero’ en el suntuoso castillo medieval.

   El protagonista de Misión Imposible, de 44 años, y su prometida, de 27 años, ambos adeptos de la iglesia de la Cienciologí­a, podrí­an optar por casarse según el rito de esta secta.

   La ceremonia nupcial de esta secta, fundada por el escritor de ciencia ficción Ron Hubbard, se parece a la católica, con intercambio de anillos y la presencia de testigos, pero no contempla música y el vicario oficia el enlace con una cruz de plata y vestido de negro.

   Según el diario Il Messaggero, la fiesta se prolongará del 16 al 18 de noviembre y habrá 250 invitados, en su mayorí­a estadounidenses, entre ellos los enviados especiales de Hollywood Reporter, Variety y las grandes cadenas de televisión Nbc, Cbs y Abc.

   Pese a que no ha trascendido casi nada sobre la ceremonia –para muchos producto de una hábil estrategia publicitaria–, el viernes se ha divulgado el acuerdo prenupcial firmado por la pareja, que prevé una multa de 5 millones de dólares para el que «ponga los cuernos» durante el primer año de matrimonio.

   Según Il Messaggero, los dos se comprometieron a no revelar públicamente detalles de su vida privada, en particular de sus relaciones sexuales, que quedaron completamente «blindadas».

   Por ahora nadie ha logrado la confirmación de las nupcias por parte de los propietarios del castillo, descendientes de una de las familias con más tí­tulos nobiliarios de la pení­nsula, con varios Papas y cardenales en su abolengo.

   Entre tanto, ilustres personajes de la jet set italiana intentan ya obtener una invitación a la boda del año.

   Por ahora, el único que parece haber recibido la deseada invitación es el cantante y tenor italiano Andrea Bocelli, quien volará dentro de unos dí­as a Nueva York para amenizar obra boda mundana, la de Gina Lollobrigida, el 29 de noviembre.