«No es montaje»


Con tremendos golpes en la cabeza, un par de costillas fracturadas, una operación y un ojo dañado producto de las muchas lesiones que tiene que pasar un luchador en el ring, son parte del repertorio de los 36 años de profesionalismo del enmascarado Súper Tigre.


El ágil y veloz Súper Tigre ha sido el protagonista en el ring de un sinnúmero de máscaras y cabelleras.

Y con toda razón y solvencia moral, cuando más de algún curioso de la lucha libre en Guatemala le ha cuestionado en alguna ocasión sobre la realidad que se vive en el ring, el Súper Tigre no deja de molestarse y de invitar a los que dicen que en la lucha todo es pantomima, a que suban al ring a comprobar lo efectivo de los golpes.

Pero no todo ha sido pura patada y puñetazos en vano para Súper Tigre, pues en su haber también ha cosechado un sin número de mascaras, cabelleras y diplomas, no sólo en Guatemala, sino en el plano mexicano, paí­s que es considerado la cuna de la lucha libre profesional.

Hoy, a sus 49 años este veterano luchador nacional se propone a toda costa revivir la pasión de la lucha libre en Guatemala, así­ como darle el empuje y lugar que se merece este olvidado deporte en el paí­s.

Pregunta: ¿Por qué resurge la idea de la Arena Olimpo luego de desaparecer seis años?

Respuesta: Como director técnico y luchador de la Arena Olimpo, siento que todos los que amamos a este deporte estamos comprometidos al resurgimiento de la lucha libre en Guatemala. En la Arena Olimpo tanto los luchadores como personas externas al deporte queremos darle el empuje y lugar que la lucha se merece en el paí­s, dado que su decaimiento empezó a finales de la década de los 80″s, cuando los gimnasios se interesaron más en lo económico, en vez de preocuparse por brindar un espectáculo de calidad.

El espectáculo de la arena funcionó seis años y cerró hace seis y resurge con la idea de apoyar al deporte y a los nuevos valores de luchadores, y aunque estamos conscientes de que no todo será fácil, no vamos a permitir la interrupción del proyecto, dado que se anuló la contratación del nuevo local en la 2 Avenida 14-56 de la zona 1, por contar nada más de parte de la Municipalidad con permiso de parqueo y no como un salón de usos múltiples.

Pese a ello, les garantizamos a los aficionados la quinta presentación del resurgimiento de la Arena Olimpo y le pedimos disculpas por la interrupción del mismo.

Aún así­, su cierre temporal no deja de afectarnos económicamente debido a que para la quinta presentación se trajo a Guatemala a dos luchadores salvadoreños y se incurrió en el gasto de transporte, alojamiento y alimentación, dado que en Guatemala la mayorí­a sabe que no se puede vivir de la lucha libre, por lo que nuestro aporte es por el amor al deporte.

P: ¿Cómo fueron sus inicios en la lucha?

R: Me inicié en 1972, cuando tení­a 13 años, pero no como un luchador profesional, sino como un amateur bajo la dirección de Javier Raxón. A los dos años de entrenar con Raxón comencé a incursionar como luchador profesional con Macario Cruz.

Ya como profesional en 1976 recuerdo que las luchas se hací­an en las iglesias y escuelas para la recaudación de fondos que ayudaran a mejorar sus instalaciones. Otra razón de este tipo de presentación era porque en aquel entonces existí­a nada más el Gimnasio Nacional, que era el que estaba autorizado para este tipo de espectáculo.

Sin embargo, un año más tarde se inició la pequeña Arena Florida, de donde se me abrieron las puertas para luchar en otras arenas, que ya empezaban a surgir y en donde las presentaciones duraban de cuatro a cinco dí­as continuos a la semana.

P: ¿Por qué Súper Tigre?

R: Porque me gusta mucho el color de este animal, que es bastante atractivo, ágil, agresivo y feroz. Creo que un tigre es algo corriente, pero un «Súper» tigre es algo especial y eso trato de hacer en el ring, una manera especial de actuar ante el público con una máscara vistosa en representación del tigre.

P: ¿A qué personajes se puede apreciar en la Arena Olimpo?

R: Personajes son todos, pero los de mayor trayectoria, o en plan exclusivo, está el Gran Jaguar, Súper Tigre, Ciclón Chapí­n (padre), Tencus (padre), que alternan con los júnior y quienes vienen dando lo mejor de sí­.

P: ¿En la lucha quien su mayor admiración?

R: En el plano internacional al número uno, Santo el enmascarado, y a nivel nacional a José Azzari y el Rayo Chapí­n, pues Azzari fue quien abrió las puertas de la lucha libre en Guatemala. El más grande de todos los tiempos es el Santo, porque nunca se dejó quitar la máscara y lo mismo deseo hacer.

P: ¿Qué le molesta de la lucha?

R: El que alguien me diga que los golpes en el ring son sólo puros cuentos, que están preparados o montados, pero les contesto que si tienen duda que suban al cuadrilátero para comprobarlo por sí­ mismos. En la lucha no todo es montaje, porque se monta nada más el escenario y otros aspectos del entorno, pero los golpes son reales.

P: ¿En cuánto tiempo se presentará un Súper Tigre Júnior?

R: Esa cuestión le tocará decidirlo a mi hijo, quien últimamente se ha interesado mucho en la lucha, de hecho está entrenando fuertemente con nosotros en el Olimpo, pero aún así­, para no denigrar a la lucha se debe de tener mucho cuidado en que no suba pronto al ring hasta que esté bien preparado.