Desde hace 20 años me dedico a la genealogía del departamento de Zacapa y mi trabajo depende en gran parte del acceso que tenga a los archivos, especialmente de los registros civiles.
Por circunstancias de mi trabajo me vi involucrado en actividades para la creación del Documento íšnico de Identificación en el año 1980, cuya función sería la que ahora desarrolla el Renap.
Si partimos del punto de vista egoísta de que, lo que no le favorece a uno, no se debe de apoyar, yo debiera de ser enemigo acérrimo de Renap, pues mientras hasta hace apenas un año tenía acceso a los registros civiles de los municipios del departamento de Zacapa, ahora que pasaron bajo la jurisdicción de Renap, ese acceso se me ha negado, a pesar de mi solicitud por escrito.
Toda esta explicación la hago para que los que lean esta opinión, no crean que me mueve algún interés personal al defender a Renap, sino que lo hago porque creo que es necesario para Guatemala y que nos colocará en una buena posición en cuanto a la credibilidad de nuestros documentos.
Un grupo de alcaldes, no sé si dirigidos, argumentan que el Renap viola su autonomía municipal y que es la mayor fuente de ingresos de su comuna. Yo puedo asegurar que eso es falso de toda falsedad, pues las oficinas, el personal, el uso de equipos, etc. su costo es igual o mayor de lo que se recibe, en cuanto a la autonomía, no sé que entienden estas personas por autonomía.
Probado y rete contra probado es que los registros civiles extendían documentación no creíble y en muchas ocasiones falsa, sobre todo antes de las elecciones. También es probable que el aporte del Estado que está basado en el número de habitantes está alterado, para que este aporte sea mayor, por lo que cuando el Renap empiece a extender las identificaciones, se dará cuenta que mucha gente no existe, y si existe no vive en esos municipios sino que en la capital.
Además de todos estos usos ilegales que se hacía de la documentación, el 80% de los que asistían a las municipalidades, era por motivos de documentación, siendo que ahora se mantienen vacías, por lo que los alcaldes pierden la categoría de tatitas del pueblo.
Por todo lo anterior creo que sería un retroceso para Guatemala y para sus sistemas de seguridad que no se continúe con el Renap, salvo que hayan intereses de una agenda oculta.
Aprovecho esta opinión para sugerir a las autoridades del Renap que cumplan el precepto constitucional del libre acceso a la información, especialmente cuando las personas puedan probar el buen uso que le darán a la información.