Con 1.896 millones de dólares, Costa Rica es el país de Centroamérica que más inversiones extranjeras directas (IED) recibió el año pasado, seguido a corta distancia por Panamá, con 1.825 millones y El Salvador, con 1.526 millones, según el Informe Mundial de Inversiones 2008, divulgado este miércoles.
Costa Rica se benefició del crecimiento global que registraron las IED por tercer año consecutivo a nivel mundial, y que se situó en torno del 36%, a 1,8 billones de dólares, todo un récord.
En el Istmo, Costa Rica, Panamá y El Salvador lideran esta tabla de clasificación, con una captación del 27%, el 26% y el 21%, respectivamente, de las IED, muy por delante de países como Honduras (11%), Guatemala (10%) o Nicaragua, con un 5%.
A nivel latinoamericano, la IED creció en 2007 un 36%, aunque Brasil, México y Chile acapararon el 60% de los 126.000 millones de dólares que llegaron a la región, precisa este informe presentado en la sede del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en la capital costarricense.
Entre los diez primeros de la región latinoamericana, aparecen por primera vez Costa Rica y Panamá en los puestos noveno y décimo, respectivamente.
El informe se hace eco de las «medidas contrarias» a la captación de la IED que han adoptado países como Ecudador, Venezuela, Argentina, Bolivia, Nicaragua y República Dominicana, mientras que países como Colombia, Perú, Uruguay, El Salvador, Chile, Costa Rica y Panamá han adoptado medidas favorables a la inversión directa.
Pero los mayores receptores de IED siguen siendo los países desarrollados, que captaron el 68% de la inversión directa mundial, liderados por Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Canadá, Holanda y España.
El informe, que vaticina una reducción de la IED para el próximo año como respuesta a la crisis actual, analiza en esta edición las ventajas y las preocupaciones que implica para los países el aumento registrado en la participación de empresas transnacionales en el desarrollo de infraestructura en los países en desarrollo, un sector que tradicionalmente había sido feudo del Estado.
Para Lara Blanco, representante en funciones del PNUD en Costa Rica, «lo ideal sería que el Estado aumentara sus inversiones en infraestucturas» tales como agua, electricidad, telecomunicaciones o transportes, aunque lejos de criticar la participación de la empresa privada, considera que se trata de una «tarea conjunta» de lo público y lo privado.
De hecho, la inversión extranjera «puede contribuir a la ampliación de la infraestructura en los países en desarrollo si la planificación es adecuada», señala el informe.
Por ello, «los organismos públicos deben tener la capacidad institucional y las competencias necesarias para guiar, negociar, reglamentar y supervisar los proyectos», recomienda el informe.
Costa Rica 27%
Panamá 26%
El Salvador 21%
Honduras 11%
Guatemala 10%
Nicaragua 5%
Fuente: IED