El aumento de los precios del petróleo podría tener efectos positivos en Estados Unidos, según expertos que ven en el mismo la oportunidad para que los estadounidenses adelgacen y estén más en forma, y que conduzcan menos y más lentamente.
«La teoría indica que si el precio de la gasolina sube, las personas caminarán más y andarán más en bicicleta. O toman transportes públicos, lo que supone una caminata para ir a la estación y regresar», subrayó Charles Courtemanche, profesor de economía de la Universidad de Carolina del Norte (sureste).
«Las personas también van menos a restaurantes cuando los precios de la gasolina suben, ya que hay que conducir para ir y tienen menos dinero», añadió.
Courtemanche estudió los precios de la gasolina en varios estados estadounidenses de 1984 a 2004 para construir su teoría que vincula el costo del combustible con la obesidad. Comparó continuamente el peso promedio y la tasa de obesidad por estado con el precio de la gasolina.
«Descubrí que un dólar de incremento permanente sobre el precio de la gasolina está asociado a un retroceso de 7% del sobrepeso y de 9% cuando se es obeso», indicó.
Si se convierte en kilos perdidos, un incremento de un dólar en la gasolina significa una pérdida de peso evaluada entre 1,8 kg y 2,2 kg, según sus investigaciones.
El combustible caro también obliga a los estadounidenses a conducir más lentamente para hacer durar más el tanque lleno. Y una consecuencia inesperada es que disminuyó la cantidad de muertos en las rutas, además de la contaminación.
El precio del petróleo también alentó a los fabricantes de automóviles a producir vehículos más económicos, lo que podría crear miles de empleos, reforzar la seguridad energética estadounidense y alentar el ahorro local, afirma la organización de científicos Union of Concerned Scientists (UCS).
«Lograr que para 2020 los automóviles en circulación rueden como mínimo a un promedio de 56 km por galón de gasolina (3,78 litros) reduciría la cantidad de petróleo utilizado en 1,1 millón de barriles diarios», estimó un ingeniero del UCS, Jim Kliesch, en un comunicado.
«Además, este consumo (…) en el parque automotor en general crearía 149 mil empleos en el país en 2020», añadió Kliesch.