El sábado 26 de julio publiqué un artículo referente a los correos basura que atiborran mi buzón electrónico, de tal manera que todas las mañanas y tardes debo lidiar con mensajes comerciales y de otra índole que invaden sin previa autorización mi espacio cibernético privado.
eduardo@villatoro.com
Al respecto pedía la ayuda de algunos(as) de mis contados(as) lectores, en el sentido de que me proporcionaran información acerca de un método que pudiera solucionar ese problema. De los correos que recibí en torno a este agobiante asunto, les compartiré el que me envió la ingeniera en sistemas Tania Hernández, porque muchos usuarios de la Internet afrontan el mismo conflicto, de suerte que lo que me recomienda a mí es aplicable a cualquier otra persona en iguales circunstancias cibernéticas que las mías.
Sugiere Tania varias opciones: a) cambie regularmente de dirección de correo; b) cambie a un proveedor que tenga mejor filtro de spam; c) si usa Outlook, puede instalar un sofware antispam (hay gratis en Internet; busque en spam-filter); d) utilice dos direcciones de correos, para los lectores y para sus amigos y familiares, y e) cuando borre un spam, márquelo como tal, junk-mail o indeseable.
Advierte la ingeniera Hernández que, contra la creencia común, el spam no es enviado directamente por una persona o empresas específicas, sino que por un programa que busca en las páginas de Internet todas las direcciones que aparecen.
Como el emisor generalmente no es la persona o empresa que aparece en el encabezado, nunca se debe responder a un spam, porque al hacerlo sólo se confirma la dirección, y por ese medio busca en su lista de amigos las direcciones de ellos para agregarlas a su base de datos. Jamás le dé click a un link en un spam, porque además de confirmar su mail en la base de datos, puede contagiar de virus su computadora. Además, nunca proporcione información privada por mail o en una página que le llegó por un correo electrónico.
Agrega Tania Hernández que las páginas a las que ingresa información privada deben tener seguridad (un candadito cerrado en la parte inferior de la página), salvo que sea una empresa a la que usted haya solicitado algún servicio. Existen los llamados fishing mails, por medio de los cuales se le envía un correo de determinado banco o de una empresa de tarjetas de crédito, que requieren datos suyos, lo cual depende de usted. Para más información, busque en Wikipedia spam.
Gracias por la información, amiga Tania.
(Romualdo Hinformátyko, al observar que su amigo Cipriano Himeil lleva una especie de parche en el hombro izquierdo, le pregunta: -¿No que ya habías dejado de fumar, pues? El camarada responde: -No es un parche contra la nicotina, vos. Es la figura de un cd-room, porque estoy intentando dejar la computadora).