Herederos de Marceau bailan y hablan


El festival internacional de mimo de la ciudad francesa de Périgueux programa hasta el sábado a unos artistas que se alejan de los códigos de la pantomima popularizados por el gran Marcel Marceau y se abren a otras disciplinas como el baile hip-hop, la animación y el video.


«Los mimos de hoy en dí­a ya no van de blanco, hablan en el escenario, no se complican tanto», cuenta Etienne Bonduelle, director del centro nacional del mimo y responsable artí­stico del festival Mimos, creado hace 25 años.

«Lo importante es la escritura. Si el cuerpo predomina y es dramático, estamos en el ámbito del mimo», explica a propósito de un arte que no se limita a la pantomima de «Bip», el Pierrot pálido y silencioso con la boca de color rojo sangre, el personaje inventado por el mimo Marceau.

«En el plano estético, hemos pasado la página de Marceau. Pero tenemos un gran respeto por su aportación, que es un tesoro», añade.

Los herederos de Marcel Marceau practican ahora el baile hip-hop, utilizan el ví­deo o experimentan con el cuerpo como objeto «manipulable».

Accrorap, primera compañí­a de baile hip-hop invitada a Mimos, reivindica la filiación coronando su actuación de alto nivel con un homenaje al mimo fallecido en septiembre de 2007.

«El hip-hop, aparecido en 1984 en Francia, ha evolucionado constantemente pillando cosas por aquí­ y por allá y el propio mimo Marceau ha sido un personaje importante en la elaboración del smurf, una de las técnicas del hip-hop», explica el coreógrafo Kader Attou.

«En su momento, cuando bailaban, hací­an «el espejo» y eso era el mimo Marceau. Lo mismo pasaba con el movimiento al ralentí­, que es una técnica muy propia del baile hip-hop», añade el conceptor de «Petites histoires.com», cuyos sainetes a ritmo y divertidos fueron muy aplaudidos.

El «rey del pop» Michael Jackson se ha inspirado mucho en la «marcha contra el viento» de Marceau para hacer su célebre «moonwalk».

El ví­nculo entre mimo y ví­deo, más antiguo, también está presente en Mimos, en especial con «Holeulone», de la compañí­a belga Dame de Pic, con dos artistas confrontados en medio de pinturas animadas.

El gran público puede iniciarse en los «principios comunes de las disciplinas del mimo y la animación» a través de los cursos prácticos dirigidos por el norteamericano Robert Bennett, que trabajó con los estudios Walt Disney.

«El mimo va en todas las direcciones», resume Etienne Bonduelle. «Muchos alumnos de Marceau trabajan hoy en el cine de animación y en los juegos ví­deo. Aportan un conocimiento muy útil del cuerpo y de sus movimientos», añade.

Esta diversidad explica también que a la disciplina, un mundillo de «medio millar de practicantes» en Francia, le cueste hacerse un lugar entre la danza y el teatro, lamenta.