Las extorsiones de pandilleros contra empresarios del transporte público en El Salvador no cesan y el oponerse al pago de las mismas ha significado el asesinato de medio centenar de empleados del sector durante el año.
«Las extorsiones siguen a la orden del día, el sector está siendo impactado considerablemente en el aspecto económico por este problema, pero no queda otra que pagar la extorsión, de lo contrario lo que ocurre es el asesinato de los empleados, es preocupante», dijo el presidente de la Federación de Cooperativas y Asociaciones de Transporte (Fecoatrans), Catalino Miranda.
La policía, en conjunto con la Fiscalía General de la República (FGR), mantiene una constante labor de investigación para atrapar a los pandilleros, que en lo que va del año han cobrado la vida de 49 empleados de empresas de transporte público que se negaron a pagar la extorsión, a la que llaman «renta».
Los casos más recientes de asesinato ocurrieron el pasado fin de semana cuando tres trabajadores de la ruta 6 de microbuses fueron asesinados en una zona conocida como Mariona, 6 km al norte de San Salvador, un lugar asediado por pandilleros de la mara Salvatrucha (MS 13) y la Mara 18. El hecho fue atribuido a pandilleros de la zona por la policía.
Ayer, un microbús de transporte público fue incendiado por desconocidos en la periferia noreste de San Salvador, incidente que se explicó como una venganza de pandilleros a los que la empresa se negó a pagar la «renta».
«La denuncia se hace a las autoridades, ya en esa parte depende de ellos que procedan con las investigaciones y detengan a la gente que se dedica a extorsionar, porque no sólo son pandilleros los que lo hacen, hay gente común y corriente que se hace pasar falsamente como miembros de pandillas para que uno pague», sostuvo Miranda.
Según los gremios de empresas de transporte público, algunas rutas de buses y microbuses llegan a pagar semanalmente sumas «exorbitantes» a las pandillas.
«Hay rutas de buses y microbuses que semanalmente están entregando a los «mareros» hasta 10 mil dólares a cambio de no atentar contra los trabajadores y los vehículos», agregó el presidente de la Asociación de Empresarios de Autobuses Salvadoreños (AEAS), Genaro Ramírez.
En 2007 unos 130 empleados del sector de transporte público fueron asesinados en hechos relacionados con el pago de la renta.
Las autoridades de Seguridad Pública consideran que si bien las muertes de trabajadores del sector transporte pueden estar relacionadas con el no pago de la renta a los pandilleros, también existen casos en que los asesinatos «son por rencillas personales».
«Es preocupante cuando asesinan a un motorista, pero no todas las muertes estan relacionadas con extorsiones», afirmó el ministro de Seguridad Pública, René Figueroa, quien no obstante dijo que se ha reforzado los planes de seguridad al transporte.