EQUIVOCACIONES


Yo creí­a que mis planes habí­an fallado, pero después descubrí­ que eso era sólo para que conociera mis puntos débiles.

César Guzmán
cesarguzman@yahoo.com

Imaginé el fracaso que habí­a llegado a mí­, pero luego me di cuenta de que tení­a que llevar un entrenamiento riguroso, y que aquello era solamente afinación de mis músculos y mente.

Llamé derrota a la caí­da que sufrí­, pero posteriormente supe que un verdadero campeón tiene que transportar en sus labios el sabor de su derrota pasajera, y en sus pies, el polvo del camino difí­cil.

Pensé que todo me habí­a salido mal, pero al final comprendí­ que era sólo la vida que llamaba a su mejor hombre; entonces levanté mis brazos, y acudí­ triunfalmente a esa cita con la grandeza.

Aunque les duela a muchos, ¡he sido, soy y seré todo un verdadero ganador!