La permanencia de centroamericanos indocumentados en territorio europeo -condición adversada por la «Directiva de Retorno»- formará parte de la negociación del Acuerdo de Asociación que se realiza entre Centroamérica y la Unión Europea.

«No podemos criminalizar a los migrantes», indicó el viceministro de Relaciones Exteriores, Miguel íngel Ibarra, en referencia a las disposiciones migratorias que promueven los paí­ses miembros de la Unión Europea (UE).

A criterio del funcionario, la Directiva de Retorno -ley recién aprobada por la Eurocámara- representa una amenaza para las familias latinoamericanas que radican en paí­ses europeos en condición migratoria irregular, ya que facilita la expulsión hacia sus paí­ses de origen sin considerar las repercusiones que eso conlleva.

Ibarra señaló que el tema migratorio se incluirá dentro de las discusiones del área polí­tica del Acuerdo de Asociación, que además incluye acuerdos en aspectos económicos y de cooperación entre ambos bloques.

Modificación

Pese a la expectativa que mantiene el vicecanciller para que se anule la Directiva de Retorno, también indicó que ésta podrí­a ser modificada a través de un acuerdo mutuo entendimiento entre los negociadores de ambas regiones.

«La idea principal que da origen a las disposiciones migratorias europeas se fundamenta en el ordenamiento migratorio, con lo cual estamos de acuerdo pero debemos discutirlo a profundidad», indicó.

Ibarra dijo que se promoverá la implementación de una polí­tica que permita a los centroamericanos viajar a Europa, habiendo asegurado ya un trabajo y una residencia, «lo cual serí­a una forma ordenada de atender las migraciones».

La propuesta de la Cancillerí­a incluye la solicitud de un permiso especial para que los guatemaltecos que actualmente viven en situación migratoria irregular puedan continuar trabajando sin correr el riesgo de ser expulsados.

El funcionario aclaró que la discusión polí­tica sobre las migraciones no tocará temas de fondo en los otros dos aspectos de la negociación, ya que hasta la fecha «se han visto importantes avances».

Posibilidad

Ubaldo Villatoro, representante de la Mesa Nacional para las Migraciones (Menamig), indicó que la negociación del bloque centroamericano en el Acuerdo de Asociación para detener las deportaciones de EU, debe ser sólida y fundamentada en el principio de los derechos humanos.

A criterio del activista social, es necesario que se fortalezcan los principios de unión entre los centroamericanos para defender a la población que se encuentra en riesgo de ser expulsada por la Directiva de Retorno.

«Necesitamos la presencia de las autoridades y su firme decisión en la polí­tica exterior para impedir que continué la desintegración de familias a causa de la discriminación de las leyes migratorias», destacó.