Una lección de vida


Randy Pausch disfrutaba de sus últimos momentos de vida en compañí­a de su esposa y dos de sus hijos.

El profesor de informática de la Universidad Carnegie Mellon (Estados Unidos), Randy Pausch, considerado una de las 100 personas más influyentes del mundo por la revista «Time», falleció ayer a causa del cáncer de páncreas que sufrí­a, después de batir récords de descargas en Internet y ventas de libros por sus discursos sobre cómo afrontar positivamente esa enfermedad.

Redacción Internacional
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Pausch se convirtió en un fenómeno mediático en Estados Unidos y un referente mundial, tras realizar una conferencia sobre cómo imaginaba los últimos dí­as de su vida y en las que su optimismo conmocionó a los asistentes.

Inmediatamente sus ví­deos se convirtieron en un fenómeno de masas, con más de 10 millones de descargas en Youtube, foros, una comunidad en Facebook -«Randy Pausch es mi héroe»- y un blog visitado diariamente por millones de personas, en el que escribí­a asiduamente.

Llegó a dar un discurso ante el Congreso estadounidense, fue invitado en varias ocasiones a programas de televisión y recientemente se publicó un libro sobre su historia -La última lección-, que en dos semanas fue el más vendido de Estados Unidos, y ya se ha adaptado a 32 paí­ses, superando los 5 millones de ejemplares.

Motivador

Randy Pausch, cuyo libro La última lección, acaba de ser publicado en Estados Unidos y el video en de su conferencia en YouTube ya supera los tres millones de visitas, falleció a los 47 años.

La última vez que el profesor estadounidense de informática Randy Pausch entró a su blog en Internet fue el pasado 26 de junio cuando escribió: «Continúo recuperándome lentamente, el efecto acumulativo de la quimioterapia hace que me tome más tiempo mejorarme de cada sesión».

Pausch fue paciente terminal de cáncer de páncreas, pero, como él mismo lo comentó, escogió vivir sus últimos dí­as al máximo y con alegrí­a.

«Estoy siguiendo los procedimientos médicos, pero se muy bien que esta pelí­cula está por terminar. Y no puedo controlar las cartas, solo juego cada «mano», dijo.

Estas palabras hacen parte de la conferencia «La última lección» que dictó Pausch, el 18 de septiembre del año pasado ante un auditorio de 400 personas, en la Universidad de Carnegie Mellon, en Pittsburgh.

La única petición que hizo Pausch, de 47 años, fue la filmación de su conferencia con el fin de dejarle un testimonio de vida a sus tres pequeños hijos Dylan, Logan y Chloe, de cinco, dos y un año.

La conferencia en inglés de una hora y 16 minutos, se ha convertido en un fenómeno mundial con más de 3 millones de visitas en YouTube.

Además su libro, ya supera los tres millones de ejemplares vendidos en 32 paí­ses, desde el mes de abril, que salió a la luz pública, según informó la editorial Random House Mondadori.

Es una tradición en las universidades estadounidenses que alguna personalidad reconocida, bien por su éxito en algún campo profesional o académico, dicte a los alumnos que están por graduarse una conferencia de enseñanzas de vida.

Por los dí­as en que las directivas de la universidad le propusieron a Pausch la conferencia, le dictaminaron la aparición del cáncer en su páncreas. Era agosto de 2006.

* Con información de Internet.