UN GRAN PORVENIR


Hoy, al despertar, debo encencer en mi corazón la llama de la fe; así­ podré contentarme con todo aquello que realice.

César Guzmán
cesarguzman@yahoo.com

No permitiré que el desaliento invada mi ánimo, porque me debilitaria y no tendrí­a fuerzas para enfrentar la adversidad.

Inyectaré en mi alma una dosis de optimismo y alegrí­a, así­, éste quedará en cada una de las obras que realice, como un sello de la valentí­a que me conducirá hacia el triunfo.

Sé que el secreto del éxito consiste en arriesgar inteligentemente lo que se posee, con habilidad y confianza en uno mismo, porque se sabe que las posibilidades de triunfar son mayores que las de fracasar.

Si hago eso, descubriré que vale la pena vivir, y que cuando el espí­ritu está lleno de motivación, la vida florece cada dí­a más.