Las luces y sombras del TLC, dos años después


A dos años de la implementación del Tratado de Libre Comercio entre Centroamérica y Estados Unidos, organizaciones sociales reprocharon que los beneficios económicos que se han generado, han quedado únicamente en los sectores de poder.  La CNOC acusa a este proceso de incrementar la pobreza de la mayorí­a de la población y la crisis alimentaria.

Mientras empresarios destacan los logros económicos alcanzados en los dos años de vigencia del Tratado de Libre Comercio entre Guatemala y Estados Unidos, grupos sociales responsabilizan al acuerdo de la crisis alimentaria y el incremento de la pobreza, que afecta a 50% de la población.


El sector exportador hasta el momento está complacido con los resultados, pues la inversión extranjera directa ha registrado un fuerte crecimiento y las exportaciones a Estados Unidos aumentaron un 13,2%, pese a la contracción económica en el paí­s norteamericano.

La directora de la Cámara de Comercio Guatemalteco-Americana (AmCham), Carolina Castellanos, indicó que la brecha comercial se ha mantenido a favor de Estados Unidos, pero el comercio ha registrado un aumento, aunque no como lo esperado debido, especialmente, a la baja de exportaciones en textiles.

Datos oficiales indican que las importaciones en el 2005 eran de 3 mil 471 millones de dólares mientras que en el 2007 pasaron a 4 mil 098.

En cambio, las exportaciones no han reflejado este aumento ya que hace dos años sumaron 1.046 millones y el año pasado alcanzaron mil 148 millones.

«La contracción de la economí­a estadounidense afecta afecta principalmente al sector textil, ya que las prendas de vestir son un artí­culo de segunda necesidad. Se ha visto una reducción en los pedidos», lamentó la dirigente.

Sin embargo, las «inversiones han crecido de 208 millones de dólares en el 2005 a 507 millones en el 2007. Esta cifra representa un crecimiento de 227% de incremento frente al 2004», puntualizó.

El optimismo empresarial contrasta con el pesimismo de organizaciones sociales al considerar que solo ha beneficiado a la oligarquí­a y terratenientes del paí­s, en detrimento de la población más vulnerable, especialmente campesinos e indí­genas, donde se concentran los mayores í­ndices de pobreza.

«Luego de dos años de entrada en vigencia el TLC, empieza a verse con más claridad qué efectos ha tenido en la agricultura nacional, y en nuestra soberaní­a alimentaria», lamentó el dirigente de la Coordinadora Nacional de Organizaciones Campesinas (CNOC), Santos Chic.

«Acá los grandes beneficiados son los poderosos y los perjudicados nosotros, porque con el TLC están sembrando maí­z, azúcar y palma africana para exportarla, porque ahora solo les interesa producir granados para producir combustibles, para hacer caminar vehí­culo y no alimetar personas», lamentó.

La apreciación de Chic es respaldada por un informe del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) donde reveló que unos 700 mil guatemaltecos pasaron a engrosar los í­ndices de pobreza y otros 500 mil la pobreza extrema en los últimos dos años.

Aunque la organización mundial estima que es un efecto por el alza de la canasta básica ante el alto precio del petróleo en el mundo y no por el tratado comercial que entró en vigencia el 1 de julio de 2006.