La necesidad de reformar el Código de Trabajo tiene cada día más resonancia dentro de las propuestas de sindicalistas y analistas.
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David Morales, miembro del sector laboral, considera que las leyes deben ser renovadas constantemente para ser adecuadas a las necesidades de la población, por lo que debe existir interés en la sociedad civil para exigir una renovación acorde a la realidad.
A criterio del sindicalista, el Código Laboral es uno de los compendios legislativos que merece una exhaustiva revisión, para su modificación «objetiva y categórica».
«Las necesidades de los trabajadores de hoy, no son las mismas que las de hace años (…) ahora se requiere de una actualización en las regulaciones en las condiciones de trabajo y otros puntos que antes no se tomaban en cuenta», señala.
Según Morales, no se puede alterar por completo el orden de la normativa, ya que esto podría ocasionar problemas aún mayores.
Iniciativas para promover la flexibilidad laboral son adversadas por el movimiento sindicalista. «Las reformas deben ser de beneficio para la mayoría», refiere Morales.
Luis Linares, de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asies), indica que en el Código de Trabajo se deben contemplar los acuerdos alcanzados por el Gobierno ante organismos internacionales.
Además, señala que se debe mostrar de forma más clara las formas de pago, ya que actualmente existen vacíos legales en ese ámbito.
«Una de las modalidades comunes en la actualidad es la de pago por depósito monetario, y eso representa riesgos para los trabajadores, ya que de esa forma se pueden embargar los salarios».
«Es necesario hacer una revisión integral del Código por todos los sectores para alcanzar consensos», puntualiza Linares.