El presidente iraní Mahmud Ahmadinejad se encontraba en la mira de conspiradores que pretendían asesinarlo durante la conferencia de la FAO en Roma, a comienzos del mes, así como durante un viaje a Irak en marzo, declaró un consejero suyo este lunes.
«Las acciones del presidente en los últimos tres años pusieron en peligro los intereses ilegítimos de muchos en Irán y en el exterior, y por eso algunos imaginaron que podían desplazarlo o asesinarlo», aseguró Ali Zabihi, consejero del presidente para recursos humanos.
«Los complots para asesinar al presidente en Irak y (…) en la conferencia de la FAO (Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) fracasaron gracias a Dios», agregó, citado por la agencia Fars.
El jueves pasado, el presidente afirmó que los «enemigos» habían planificado secuestrarlo y matarlo durante su visita histórica a Irak en marzo, pero un cambio de programa hizo fracasar el plan.
«Recibimos informaciones fiables según las cuales los enemigos habían planificado secuestrar y matar al servidor de la nación (iraní) durante su visita a Irak», dijo.
Según Zabihi ciertos grupos buscaban preparar el asesinato del presidente al acercarse la presidencial de 2009.
«Como a comienzos de la Revolución (islámica de 1979) algunas personas dentro y fuera del país buscan fomentar un mal ambiente para preparar una acción en su contra (…) conforme a la orden dada (por el presidente estadounidense George W.) Bush de matar a los dirigentes iraníes», añadió.
También acusó a «ciertos amigos y a gente que pretende sostener al gobierno, pero que ha abandonado al presidente».
Ahmadinejad es cada vez más criticado, incluso dentro de los rangos de los conservadores que lo acusan de manejar mal el país y de haber provocado una inflación que alcanza el 25%.