El Instituto Nacional de Cancerología (Incan), realizan unas 4 mil pruebas anuales de cáncer, de las cuáles el 60% corresponde a análisis de cáncer cervical.
lahora@lahora.com.gt
Según el Walter Guerra, director Incan, «el cáncer de cuello uterino afecta principalmente a la mujer pobre», que generalmente llegan a consulta cuando está en estado avanzado, por lo que la mortalidad por esta causa es alta.
El cáncer cervical es la causa principal de las muertes en Guatemala relacionadas con cáncer en mujeres en edad reproductiva (16% comparado con 4% de muerte a causa del cáncer de mama), y la segunda causa de muerte relacionada con cáncer en mujeres de todas las edades, según la organización ALAS, que presta servicios de salud reproductiva a las mujeres.
Amenazas
Las mujeres con mayor riesgo de padecer esta dolencia son quienes tienen altos índice de partos, iniciación de las relaciones sexuales tempranas, mala nutrición y parejas infieles quienes pueden transmitir con mayor facilidad el Virus del Papiloma Humano (VPH), el cual es causante de la mayoría de cánceres cervicales.
Por otro lado, Guerra afirma que además del cáncer de cérvix, existe gran incidencia de cáncer de mama y del tracto gastrointestinal. «En los hombres, se ha venido como epidemia el cáncer de próstata», señala el galeno.
El cáncer de próstata es la tercera causa de muerte en varones, en Guatemala. Aunque el Incan no tiene cifras sobre la situación a nivel nacional, advierte que éste es el más agresivo para el género masculino.
Cuidados paliativos
A muchos de los pacientes víctimas del cáncer les es detectada la enfermedad en una etapa avanzada, por lo que únicamente pueden optar a un trato digno durante su etapa terminal.
La Clínica de Cuidados Paliativos del Instituto Nacional de Cancerología (Incan) atiende diariamente un promedio de 30 pacientes. Aunque en un principio surgió para brindar atención especial a enfermos con cáncer terminal, actualmente atiende a pacientes crónicos.
«El paciente con cáncer padece mucho dolor físico y presión psicológica, por lo que sufría mucho, y en Guatemala no había experiencia de atención a pacientes terminales, por lo que decidimos implementar la clínica», aduce Guerra.
Desde el año 2006 la clínica atiende pacientes crónicos y apoya psicológicamente, tanto al enfermo como a sus familiares «para que se adapten a la carga emocional del diagnóstico y las diferentes etapas del tratamiento», refirió el experto.
De acuerdo con el informe sobre defunciones en el departamento de Guatemala, del Incan publicado en 2002, de los 3 mil 950 fallecimientos por cáncer de residentes en el departamento, durante tres años, el 58.1% fueron mujeres en edad fértil.
El documento evidenció que el número de fallecimientos aumentó con el incremento de la edad (el 88% en los mayores de 39 años y más años y el 16% en las mayores de 79 años.).
De las mil 654 defunciones registradas en hombres (41.9% del total), el 84% ocurrió en mayores de 39 años y también dicha proporción aumentó con el incremento de la edad; el 17% ocurrió en mayores de 79 años.