Honduras podría enfrentar problemas para habilitar la base estadounidense de Palmerola como aeropuerto internacional, tras la inhabilitación del aeródromo de Toncontin por el accidente del viernes, debido al rechazo expresado por el embajador de Estados Unidos.
«Yo trabajé en el Departamento de Comercio y, si no recuerdo mal, hay como 30 pasos para conseguir la certificación de un aeropuerto», sentenció el diplomático, ante la decisión del presidente hondureño, Manuel Zelaya, de abrir la base estadounidense de Palmerola para vuelos internacionales.
El Gobierno hondureño resolvió la habilitación de la base estadounidense de Palmerola como aeropuerto internacional para dejar sin vuelos del extranjero al de Toncontin, luego del accidente del avión de TACA que el viernes dejó cinco muertos y 65 heridos.
Zelaya se reunió ayer en la tarde con autoridades de la empresa InterAirport, concesionaria de los aeropuertos y autoridades de su Gobierno para comenzar a diseñar un plan que permita el uso de Palmerola.
El mandatario inspeccionó el sábado la base, situada en el valle de Comayagua, 70 km al norte de Tegucigalpa, y anunció que en 60 días será habilitada como el aeropuerto comercial de la capital.
«El presidente (George W.) Bush estuvo de acuerdo, hay testigos», de que Honduras puede usar Palmerola como aeropuerto internacional, anunció Zelaya ayer.
Pero en sus declaraciones a varios medios locales, Ford señaló que «Toncontin está certificado internacionalmente (…) y muchas aerolíneas están interesadas en reanudar los vuelos» en ese aeropuerto.
«He estado hablando con algunos ejecutivos de Estados Unidos que dicen que no tienen muchos intereses en llegar a Comayagua», subrayó el diplomático.
Ford manifestó que si se usa Palmerola como aeropuerto civil habrá que «asegurar que no haya ningún daño a la parte militar».
«Hay intereses encontrados, intereses al servicio y conflictos de uno u otro nivel, económico, social y cultural», se quejó Zelaya.
La embajada de Estados Unidos y el Gobierno hondureño han sostenido siempre que Palmerola es una base hondureña y los estadounidenses son «huéspedes», pero quienes deciden todo sobre la instalación y los que ejercen el control son los estadounidenses.
En una parte muy pequeña de las instalaciones, bien amuralladas, funciona la Academia de Aviación de la Fuerza Aérea Hondureña (FAH) Enrique Soto Cano.
Palmerola, con una pista de 2.800 metros, fue inaugurada el 14 de febrero de 1985 por Estados Unidos, en el contexto de la lucha contra el gobierno sandinista de Nicaragua y los movimientos insurgentes de otros países de Centroamérica.
La base tiene todo tipo de facilidades, ha albergado a millares de efectivos estadounidenses, de los cuales actualmente permanecen unos 500 de la Fuerza de Tarea Conjunta «Bravo».