¿Crisis alimentaria en ciernes?


El mundo se expone a una «hambruna generalizada, desnutrición y tensiones sociales en una escala sin precedentes», debido al incremento en los precios de los alimentos básicos, dijo el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, situación que no le es ajena a Guatemala; en las últimas semanas, los precios del maí­z, frijol y arroz, entre otros, se han incrementado y desde ya expertos prevén escasez.


Demanda nacional

Si tomamos en cuenta que, según el Censo, en el paí­s existe una población estimada de 13 millones de habitantes (11 millones viviendo en territorio nacional) y que cada habitante consume 3.13 quintales de maí­z por año, esto significa una demanda de 34.7 millones de quintales, lo que obliga a plantar no menos de 800,890 manzanas, tal y como se reporta en el Censo Nacional Agropecuario de 2003.

Esa cantidad de tierra cultivable, según expertos, requiere de por lo menos 4.8 millones de sacos de fertilizantes. La clase modal del área sembrada de maí­z se ubica en alrededor de 2 manzanas por agricultor, esto significa que no menos del 98% de la producción proviene de pequeños productores.

El panorama de siembras para el presente año, en el caso de maí­z se ve totalmente afectado por el encarecimiento de uno de los insumos crí­ticos en la producción, los fertilizantes, que se ha incrementado su precio en un 210%, lo que provocará una reducción en los niveles de fertilización y como consecuencia una reducción drástica en la producción nacional, según estima el ex ministro de agricultura, Edin Barrientos. En el 2007, el saco de fertilizante en precio de mercado oscilaba en los Q150, hoy su precio supera los Q350 y se ignora a qué precios los venderá el gobierno a los campesinos.

El frijol, aún peor

Para el caso del frijol, el consumo anual es de 5.5 millones de quintales, requiriendo la siembra de 458,333 manzanas para las cuales se necesita 2.75 millones de quintales de fertilizante. En este caso, el 100% de los productores son pequeños, la disponibilidad de tierras es menor, pues de acuerdo con el Censo Agropecuario de 2003, solo se siembran 225,900 manzanas.

La mayorí­a de arroz se importa

En el caso del arroz, grano que prácticamente ha triplicado su precio, el consumo de los guatemaltecos es de aproximadamente 2.7 millones de quintales, de los cuales la mayorí­a han sido importados.

El panorama para la próxima cosecha no es alentador; sin embargo, el ministro de Agricultura, Raúl Robles, señaló que el paí­s produjo el año pasado 28 millones de quintales de maí­z y que este año su meta es propiciar 32 millones; incluso, considera que la producción «alcanzará para exportar a El Salvador».

Al ser consultado respecto a las afirmaciones de Edin Barrientos, quien proyecta una reducción del 30% en la producción de granos básicos como consecuencia del incremento en los precios de los fertilizantes, el titular de Agricultura dijo que el ex ministro es un experto en temas agrí­colas; sin embargo, considera que aún se está a tiempo. «El fertilizante no se va a aplicar conjuntamente con el maí­z al momento de la siembra; es más, en algunas regiones vamos a sacar buenas cosechas. Vamos a implementar 120 mil manzanas más de cultivo de maí­z y lo mismo para el frí­jol de segunda», afirmó.

Cómo lo hará, no lo explicó, pero sus detractores, entre ellos Roxana Baldetti, del Partido Patriota, sostienen que el ministro siempre confunde las cifras. «Yo le pregunté cuánto tení­a de alimentos embodegados, si hubiera cualquier catástrofe en Guatemala, y me respondió que tení­a 16 mil quintales, cuando en realidad lo que tiene son 18 mil toneladas guardadas, pero no sabe dónde están.

La diputada señaló la necesidad de que el ministro conforme un buen grupo de técnicos que lo asesore, toda vez que despidió a todos los que prestaban sus servicios para el ministerio. «La interpelación reveló que el ministro tiene poco conocimiento y con la gente que lo rodea no se va a llegar a producir lo que se hizo el año pasado, menos la meta que se está imponiendo», dijo la parlamentaria.

Para lograr una mejor producción, se requiere de semilla mejorada, según la diputada no existe en el mercado la cantidad necesaria para ponerla a disponibilidad de los agricultores. «Cuando se celebra la feria de San Isidro Labrador quiere decir que el invierno ya está instalado en el paí­s, eso ya sucedió y aquí­ ni se ha empezado a distribuir fertilizante, ni se tiene semilla mejorada para lograr una buena producción», acotó.

En su defensa, el Ministro señala que el Congreso no aprobó a tiempo el préstamo para la compra de fertilizante, pero que ya se adquirió con una inversión de Q155 millones. «El fertilizante ya salió el 12 de mayo para Huehuetenango, Quiché, Quetzaltenango, Sololá y llegará a tiempo», dijo, al momento que señaló la existencia de contratos en el ministerio con sueldos exagerados o con dos o tres emolumentos, a quienes despidió.

«El panorama de siembras para el presente año, en el caso de maí­z se ve totalmente afectado por el encarecimiento de uno de los insumos crí­ticos en la producción, los fertilizantes, que han incrementado su precio en un 80%, lo que provocará reducción en los niveles de fertilización y como consecuencia reducción drástica en la producción nacional»

Edin Barrientos,

Ex ministro de Agricultura.

«El paí­s produjo el año pasado 28 millones de quintales de maí­z y este año nuestra meta es propiciar 32 millones; incluso, la producción alcanzará para exportar a El Salvador».

Raúl Robles,

ministro de Agricultura.