La policía antidisturbios zimbabuense realizó hoy una redada en la sede del principal partido de la oposición en Harare, en momentos en que el presidente Robert Mugabe, cada día más aislado, se preparaba para pronunciar un discurso en Bulawayo, bastión de sus rivales.
Las fuerzas del orden embarcaron a todas las personas que se encontraban en Harvest House, sede del opositor Movimiento por el Cambio Democrático (MDC) en Harare, declaró el portavoz de la policía nacional, Wayne Bvudzijena.
«Sospechamos que algunos de ellos han provocado incendios en zonas rurales y vinieron a esconderse en estos locales», prosiguió.
Bvudzijena no especificó el número de detenidos. Un periodista vio cómo decenas de seguidores del MDC eran transportados en autobús hasta la comisaría central de Harare.
Para el portavoz del MDC, Nelson Chamisa, esta operación refleja «el acoso sistemático» de la oposición desde las elecciones generales del 29 de marzo, cuyo desenlace aún es incierto.
«Llegaron en autobús y en camiones. Eran más de 100», contó el portavoz, quien acusó a la policía de estar «confabulada» con el partido en el poder, la Unión Nacional Africana de Zimbabue-Frente Patriótico (Zanu-PF).
Además las fuerzas del orden registraron los locales de la principal asociación zimbabuense de observadores electorales independientes en Harare, afirmó a la AFP un miembro de la red de apoyo a las elecciones en Zimbabue (ZESN).
«La policía está registrando nuestras oficinas (…) pero por ahora no se ha incautado de nada», declaró esta fuente que pidió permanecer en el anonimato.
El MDC, que se autoproclamó vencedor en los comicios, acusa al régimen de Mugabe de librar «una guerra» contra la oposición para intentar mantenerse en el poder.
«Intentan suprimir las pruebas de la crisis. Lo que está claro es que esta gente está desesperada y dispuesta a todo», agregó el portavoz del MDC.
Cuando han transcurrido casi cuatro semanas desde las elecciones, los resultados de las presidenciales entre Mugabe, de 84 años, y el jefe del MDC, Morgan Tsvangirai, de 56, aún no se han divulgado.
Y los de las legislativas, ganadas oficialmente por el MDC, quedaron en entredicho por un nuevo escrutinio en 23 de las 210 circunscripciones del país.
Frente al principal desafío de su dilatada carrera política, Mugabe, en el poder desde la independencia del país en 1980, evita las apariciones públicas.
El viernes pronunciará su segundo discurso importante en cuatro semanas, con motivo de la Feria de Comercio Internacional de Bulawayo, segunda ciudad del país y feudo del MDC.
El presidente zimbabuense podría aprovechar la ocasión para arremeter contra el gobierno estadounidense, que el jueves afirmó estar seguro de una victoria electoral de la oposición.
«Los resultados más creíbles de que disponemos a día de hoy muestran una victoria clara de Morgan Tsvangirai en la primera vuelta y quizás una victoria total», declaró el jueves la subsecretaria de Estado estadounidense para Asuntos Africanos, Jendayi Frazer.
Frazer se reunió con el jefe del MDC en Sudáfrica y proseguirá su gira africana el viernes en Angola, donde se reunirá con el presidente José Eduardo dos Santos, aliado de Mugabe.
Mugabe acusa con frecuencia a Occidente de querer derrocarlo y lo culpa del marasmo de su economía, con una inflación que ronda el 165 mil%.