Debate áspero antes de la primaria en Pensilvania


Hillary Clinton (I), senadora de Nueva York, y Barack Obama (D), senador de Illinois, buscarán mañana ganar primaria de Pensilvania, clave para enfilarse a la última etapa para agenciarse de la candidatura demócrata. La ex primera dama aventaja por un estrecho margen, de entre 6 y 10 puntos porcentuales, según sondeos.

El tono entre los dos aspirantes demócratas a la presidencia se tornó más áspero hoy, un dí­a antes de la primaria de Pensilvania, en la cual Hillary Clinton, a quien los sondeos le dan una ventaja de entre 6 y 10 puntos, pone todo en juego para llegar a la Casa Blanca.


Ambos rivales bombardearon en los últimos dí­as las cadenas de televisión con virulentos avisos de campaña, sin dudar en ahondar las divisiones entre los demócratas.

Los últimos mí­tines de campaña también fueron ocasión de duros intercambios entre los dos precandidatos, que se lanzaron los peores reproches. Durante una reunión en Reading ayer el senador por Illinois Barack Obama acusó a Clinton de emplear una estrategia «de alcantarilla».

«Usted ha aprendido las malas artes de los republicanos al adoptar sus tácticas», dijo Obama respecto de su rival.

En una entrevista difundida hoy en el Philadelphia Inquirer, Clinton acusó a Obama «de hacer lo que hacen los candidatos cuando están desesperados».

Sondeos publicados hoy le otorgan a la ex primera dama una ventaja de entre seis y diez puntos de intención de voto en Pensilvania. Hace algunas semanas, tení­a una ventaja de 20 puntos en ese estado, de votantes mayoritariamente blancos, de mayor edad y menor nivel educativo que la media nacional, que suelen estar más inclinados a votar por la senadora por Nueva York.

Un fracaso de Clinton en Pensilvania enterrarí­a sus ambiciones presidenciales. Una severa derrota de Obama tendrí­a serias consecuencias para el senador. Es cierto que él ganó más estados que su rival, que dispone de más delegados y que obtuvo más votos que Clinton a nivel nacional, pero no ha ganado en ningún «gran» estado o estado clave en la perspectiva de la elección presidencial de noviembre.

«Si Obama no derrota a Clinton en Pensilvania, significará que habrá perdido en otro estado clave (…) y eso aumentará los interrogantes sobre su capacidad de vencer a John McCain y sobre quién serí­a nuestro mejor candidato en noviembre», declaró hoy a la cadena MSNBC Howard Wolfson, un alto asesor de Clinton.

De campaña en Scranton, cuna de la familia de Clinton, Obama dijo hoy que los resultados serí­an «muy ajustados».

Si se confirma la victoria de Clinton, pronosticada por los sondeos, la carrera por la investidura demócrata continuará al menos hasta el 6 de mayo, fecha de las primarias de Indiana (norte) y Carolina del Norte (sudeste).

Algunos analistas estiman que la carrera en la que están inmersos los demócratas podrí­a concluirse tras esta primaria. Pero nada impide a ambos rivales continuar la competencia hasta el fin del ciclo de las primarias el 3 de junio.

De campaña en Scranton, cuna de la familia de Clinton, Obama dijo hoy que los resultados serí­an «muy ajustados».