“Primero un grito, luego un empujón, más tarde una torta… al final si no hacemos nada una tumba.â€
licgla@yahoo.es
Existe un movimiento en facebook, para que “Rompan el Silencio†todas aquellas personas que han sufrido la violencia de cualquier tipo, pero, todavía existe mucho temor en Guatemala, para dar ese paso, más aún para la mujer que sufre maltrato de su pareja, el amor es muchas veces confundido con el maltrato, y el 99% de las mujeres piensan que es parte de la relación el mismo. Desde hace muchísimos años tengo relación de amistad con una familia, muy querida, tanto que a la más pequeña la conozco antes aún que cumpliera 15 años, una niña de su casa, que creció bajo el amor de toda su familia, que es muy católica y creyente apegada a sus principios, por lo que se encontraban muy cerca de la iglesia, a su parroquia llegó un nuevo diácono llamado LUIS ALFREDO ALPíREZ ESTRADA, joven aún, y por su misma cercanía lo acogieron en su casa, sin darse cuenta, que en ese corazón virgen surgió un sentimiento, bastante alimentado por la verba del joven diácono, y aun sabiendo lo prohibido del mismo, y con el dolor de su familia, continuó la relación un determinado tiempo. í‰l alimentó este sentimiento con las famosas mentiras de la mayoría de los hombres cuando tienen un compromiso, que juran y perjuran que lo romperán, sintomáticamente todos fijan un plazo que nunca se cumple, la mantuvo jurándole que renunciaría a su apostolado, con promesas de matrimonio, cosa que nunca cumplió, hasta que ella comprendió que jamás cambiaría, y tampoco su situación en la iglesia, él se transformó de un hombre dulce y detallista que juraba que no había nacido para sacerdote, al hombre maltratador física, sicológica y económicamente, esta transformación afectó a la joven que maduró sosteniendo una relación que la hacía más infeliz que feliz sobre todo acumulando un gran temor por su forma violenta de actuar, pero tanto la crítica de su propia familia, como de su entorno, así como el mismo maltrato la hicieron terminar la relación no sin antes sufrir hasta el último momento de los consabidos chantajes, de si me dejas, te mato y me mato, al terminar la relación esa fue la sentencia, donde te encuentre con otro te mato.
Estamos en 2011, ella ha superado la situación vivida, y tiene una sobrina con un embarazo de alto riesgo, a la que las tres mujeres de su familia, ella y sus dos hermanas han cuidado, siendo una familia unida, la llevaron a su chequeo porque falta poco para que dé a luz, pero no puede ser antes de la fecha prevista, se encontraban en el parqueo de un centro comercial de la zona 7 capitalina cuando en el vehículo Golf GTI negro, placas 321DRK, el sacerdote LUIS ALFREDO ALPíREZ ESTRADA embistió a la joven víctima de este mal servidor de la iglesia, quien durante su estancia en la parroquia a donde “sirve†se compró el vehículo antes mencionado y bienes materiales que le permiten tener una vida económica llena de lujos, al ver a la joven sin miramiento alguno la embistió con el vehículo que manejaba, asustada y sin saber qué hacer se sujetó del capó del mismo para evitar el atropello, por lo que sin consideración alguna, la arrastró media cuadra, dejándola herida sabiendo que es una persona diabética, pidieron auxilio a la policía que cuida el comercial y dijeron que no podían hacer nada por ser un asunto privado, y que el centro comercial era propiedad privada, al no ver reacción por parte de la seguridad, LUIS ALFREDO ALPíREZ ESTRADA, trató de regresar, siempre en el vehículo aunque no lo podían detener dos buenos agentes se pararon uno detrás de él y otro frente a él, así como un buen ciudadano le impidió el paso, hasta que salió del parqueo, sin bajarse del mismo automotor.
Inmediatamente pusieron la denuncia el MP, donde fueron bien atendidas por la Fiscalía de la Mujer, posteriormente se trasladaron al Arzobispado a denunciar el hecho, donde fueron recibidas por el Canciller, quien las escuchó, tranquilamente, y las envío al MP, cuando ellas le mencionaron que ya lo habían hecho, este cambio su actitud, y les dijo que presentaran la denuncia por escrito al arzobispo, denuncia que presentaron inmediatamente, la misma fue recibida el día 11, posteriormente una de sus hermanas ha tratado de comunicarse con el Canciller sin obtener respuesta, hasta el momento.
Según comenta la víctima tiene temor por ella y su familia, ya que mientras mantuvo la relación con este degenerado, le comentó de varios casos más en los que existieron abusos de parte de sacerdotes y que todo se arreglaba en el mismo arzobispado, indicándole que si ella lo denunciaba él tenía amigos allí que le ayudarían, por lo tanto él no tenía temor alguno, porque allí todo se soluciona, y después de la falta de respuesta inmediata ante un caso tan grave, ¿Que puede esperar Juan y María Pueblo, si no existe espacio alguno en que impere la impunidad?
Mucho criticamos a los políticos, a los abogados, a los médicos, a los operadores de justicia, pero ¿Y la Iglesia? ¿No por años se ha sabido que en la misma todo se tapa bajo el manto más asqueroso de la impunidad? ¿En quién podemos confiar, si no existe institución alguna en la que los mismos seres humanos hayan corrompido? Las instituciones surgen por la necesidad de apoyo, consuelo, justicia, y otras, de los seres humanos, pero quienes las conducen las prostituyen de la forma más vil e hipócrita, por el temor de esta familia, y como mujer, madre, profesional, y ser humano por este medio HAGO RESPONSABLE PíšBLICA Y DIRECTAMENTE A LUIS ALFREDO ALPíREZ ESTRADA, QUIEN ACTUALMENTE ES EL SACERDOTE DE LA PARROQUIA MADRE DEL REDENTOR UBICADA EN LA ZONA CUATRO DE MIXCO, A SU FAMILIA, Y A LA MISMA IGLESIA CATí“LICA, DE CUALQUIER ACTO QUE ATENTE CONTRA LA INTEGRIDAD FíSICA Y PSICOLí“GICA DE LA JOVEN DEL CASO Y SU FAMILIA, ASí COMO EXIJO SE TOMEN MEDIDAS INMEDIATAS CONTRA ESTE Y OTROS DEGENERADOS.
Todo lo anterior está debidamente documentado, tanto en el MP, como en el Arzobispado, el nombre de la familia por respeto no se menciona, pero las autoridades tienen en los expedientes la documentación correspondiente. “Un Estado donde queden impunes la insolencia y la libertad de hacerlo todo, termina por hundirse en el abismo.†Sófocles