Cuba festeja 85 años de Fidel Castro


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Con espectáculos musicales, exposiciones y expresiones de afecto, admiradores del ex presidente Fidel Castro le rindieron el sábado tributo en Cuba por sus 85 años.

Sin embargo, Castro como ha sido su costumbre en los últimos años no hizo apariciones públicas este dí­a.

«No es solo un homenaje a un ser humano que reúne muchas virtudes y valores, es fundamentalmente un acto de gratitud, de reconocimiento, al lí­der victorioso», dijo Alfredo Vera, de la Fundación Guayasamí­n, de Ecuador, institución que organizó anoche un concierto para esperar el sábado cantándole a Castro.

Por ANDREA RODRIGUEZ LA HABANA / Agencia AP

El concierto «Serenata de la fidelidad» en un teatro capitalino y al que asistieron dirigentes del gobierno e intelectuales isleños, reunió a una veintena de artistas de todo el continente y cerró con la cantante Omara Portuondo, el pianista Frank Fernández y la orquesta de Cándido Fabre, los tres de Cuba.

Paralelamente en el memorial José Martí­, de la Plaza de la Revolución quedó inaugurada una muestra de 18 piezas entre óleos y fotografí­as del artista plástico, Nelson Domí­nguez y el propio hijo del ex presidente, Alex Castro.

«Desde hace tiempo vengo trabajando la imagen de Fidel y esta exposición es el punto de partida para mi colección de retratos sobre su figura», explicó Domí­nguez a periodistas.

Medios de prensa nacionales, de carácter estatal, dieron cuenta de la fecha y reseñaron actividades organizadas por jóvenes o transmitieron imágenes documentales de la vida de Castro.

Poco dado a celebrar sus cumpleaños, el ex gobernante, quien delegó el ejecutivo en 2006 no se dejó ver aunque su impronta sí­, incluso en el exterior: la página de la cancillerí­a cubana colocó una reseña sobre las declaraciones del astro de fútbol argentino, Diego Maradona, quien extendió los buenos deseos al «comandante», un cargo que no ostenta de manera oficial pero sigue siendo un distintivo simbólico de Castro.

Maradona aseguró que Castro es «el padre de todas las revoluciones», a la vez que expresó que «hay que hacerle un monumento grande como el mundo» por su entrega a los más humildes.

Castro nació el 13 de agosto de 1926 en el oriente de la isla, en la localidad de Birán, donde también se recordó su onomástico con actividades culturales y juveniles en estos dí­as.

Hijo de padre español y madre cubana, de joven estudió en un colegio religioso y se recibió de abogado en la Universidad de La Habana, desde donde se promocionó como un dirigente polí­tico y se forjó como un lí­der.

A lo largo de su vida y sobre todo a partir del triunfo de la Revolución su figura, sus discursos o el rumbo que le dio a Cuba encendió pasiones de amor y de odio; mientras se convirtió en el peor enemigo de los gobiernos estadounidense, que incluso realizaron planes para asesinarlo.

Colocado al borde de la muerte en 2006, se alejó del poder y delegó sus funciones en su hermano Raúl Castro, quien en 2008 tras unas elecciones tomó el puesto de manera definitiva.

A mediados de 2011, Fidel Castro también dejó su cargo como primer secretario del Partido Comunista de Cuba.

Aunque suele recibir a personalidades –como su amigo el presidente venezolano Hugo Chávez actualmente en Cuba para un tratamiento médico y con quien se lo vio recientemente–, su actividad principal es escribir artí­culos y libros sobre la lucha revolucionaria.

«Nadie mejor que él comprende la parte primordial, básica, de nuestra historia, ahora él siempre ha dicho también que la historia la hacen los lí­deres y los pueblos», comentó sobre la labor de escritor del ex mandatario, su biógrafa oficial Katiuska Blanco en un reportaje televisivo trasmitido la ví­spera.

«Es un hombre que tiene muy en cuenta la trascendencia de su palabra…», agregó.

FESTEJOS
Artistas


Artistas de nueve paí­ses presentaron un concierto por el cumpleaños del ex presidente Fidel Castro, quien llegará a los 85 años alejado del poder, pero conservando muchos seguidores incondicionales en el continente.

La cantante cubana Omara Portuondo, varias veces ganadora de los Grammy Latinos; la venezolana Cecilia Todd, el uruguayo Daniel Viglietti, el chileno Pancho Villa y la argentina Liliana Herrero se dieron cita el viernes en el Teatro Carlos Marx, en la ví­spera del cumpleaños del ex gobernante.

«Lo que digamos (…) será poco para lo que él merece», dijo al dar arranque al concierto Alfredo Vera, de la Fundación Guayasamí­n de Ecuador, los organizadores del encuentro musical.

El concierto no contó con la presencia de Castro ni la de su hermano Raúl, actual mandatario cubano, en cambio se presentó el vicepresidente José Ramón Machado Ventura y algunos dirigentes del gobierno, además de intelectuales cubanos y los miembros de la familia Guayasamí­n.

«Será una serenata mayor porque el homenajeado es una figura histórica y su pensamiento seguirá atravesando siglos porque es el pensamiento de un revolucionario cabal que ha marcado la conciencia latinoamericana», dijo Viglietti a los periodistas antes de la gala.

Bautizada como «Serenata de la Fidelidad», el concierto al cual se entró por invitación fue transmitido por las señales nacionales e internacionales de la televisión cubana.

La Fundación Guayasamí­n de Ecuador maneja el legado del fallecido pintor de esa nación sudamericana Oswaldo Guayasamí­n.

El artista plástico fue amigo de Castro y uno de los pocos en lograr romper la reticencia del ex mandatario a festejar su onomástico, pues ya en los 80 le preparó fiestas y agasajos. En las décadas que le dieron continuidad a la relación —hasta al deceso del ecuatoriano en 1999— le hizo y regaló varios retratos, expuestos en la Casa-Museo Guayasamí­n en el casco histórico de la capital isleña.

Castro nació el 13 de agosto de 1926 en Birán, al oriente de la isla, de la unión de un inmigrante español y una cubana.

Estudió en un colegio religioso y se recibió de abogado en la Universidad de La Habana, desde donde se postuló como un dirigente polí­tico y se forjó como un lí­der que fue radicalizándose hasta convertirse en una figura odiada o amada, pero nunca indiferente y en franca confrontación con los poderosos en Estados Unidos.

En 1959 la revolución encabezada por Castro triunfó y él siguió en el poder hasta 2006, cuando enfermó —y estuvo al borde de la muerte— poco antes de cumplir 80 años.

A mediados de 2011 también dejó su cargo como primer secretario del Partido Comunista de Cuba.