Subastan diamantes de Onassis


En momentos en que el precio de los diamantes alcanza un récord, una espectacular selección de joyas de la colección de la multimillonaria griega Christina Onassis será subastada el 11 de junio en Londres, anunció la casa Christie»s ayer.


Anillos, aretes, collares de diamantes: unas 40 joyas de Christina Onassis, que creció rodeada de ricos y famosos y murió en Buenos Aires en 1988, a los 37 años, serán ofrecidas en el remate de joyas de Christie»s, que estima totalizará más de 8 millones de libras (16 millones de dólares, 10 millones de euros).

La venta de las joyas de la heredera del magnate naviero Aristóteles Onassis, que fue en su tiempo el hombre más rico del mundo, coincide con los precios sin precedentes de los diamantes impulsados por los temores de los inversionistas a los vapuleos de las bolsas mundiales, que los hace volcarse a los «valores refugio» como las piedras y los metales preciosos.

«El mercado de diamantes nunca ha estado más fuerte de lo que está ahora», afirmó Christie»s .

La subasta en Christie»s, que ofrecerá en total 230 joyas, revela algo del lujo de multimillonarios como Onassis, que poseí­a, entre sus muchas gemas, un diamante en forma de pera de 38 quilates, «internamente perfecto», que está estimado en 1.800.000-2.200.000 libras (3.600.000-4.400.000 dólares).

La acaudalada pero solitaria heredera -que falleció oficialmente de un edema pulmonar, pero según otras versiones de una sobredosis de barbitúricos-, poseí­a también un collar de zafiros y diamantes (240.000-300.000 dólares), otro de rubí­es y diamantes (60.000-80.000 dólares) y un pequeño Buda fabricado por el orfebre ruso Fabergé (500.000-700.000 dólares).

Las joyas de Christina Onassis evocan «un mundo de glamour asociado con uno de los nombres más emblemáticos del siglo XX», indicó Christie»s.

Ese glamour de la hija de Aristóteles Onassis y Tina Livanos empezó muy temprano: a los dos años, en Hamburgo (Alemania), en brazos de su padre, quebró la botella de champán que bautizó el barco carguero más grande jamás construido, el «Tina Onassis». Y a los cinco, asistió a la boda de la estrella estadounidense Grace Kelly con el Prí­ncipe Rainiero.

Sin embargo, todo ese glamour, su ingreso de un millón de dólares semanales, fuera de impuestos, su yate, que era el más grande y lujoso del mundo, no le evitaron a Christina una vida familiar, afectiva y sentimental llena de desasosiegos.

Además de las joyas de Onassis, Christie»s venderá otras piezas espectaculares, entre ellas un diamante de 30.81 quilates, estimado en 500.000-700.000 dólares, y un anillo con un diamante de 7.12 quilates de tonalidades verdes azuladas (360.000-440.000 dólares).

Los diamantes translúcidos están bien representados en la venta, con uno de los collares más excepcionales del siglo XIX jamás ofrecido en subasta, con piedras de 1 a 10 quilates. Esa pieza tiene una estimación de 400.000-500.000 libras (800.000 dólares a 1 millón de dólares).

También hay un pendiente con un diamante de 15.02 quilates en forma de corazón (1.200.000-1.600.000 dólares) y un par de pendientes, con diamantes ovalados de 5.89 y 5.84 quilates, que están estimados en 200.000 dólares a 300.000 dólares.

Asimismo, figura en la venta una joya que perteneció a Juan Antonio de Beistegui, que fue embajador de México en España, a principios del siglo XX, que la mandó a hacer para su esposa, Lolita de Yturbe, conocida como «La Belle Mexicaine» (la hermosa mexicana).