Paulson aboga por TLC


El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Henry Paulson, reclamó al Congreso de su paí­s que apruebe «sin más demoras» el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Colombia, que el presidente George W. Bush envió ayer a los legisladores.


«Llamo al Congreso de Estados Unidos a mostrar su apoyo al pueblo colombiano (…) aprobando el acuerdo comercial con Colombia sin más demoras», declaró Paulson en un discurso durante la asamblea anual del BID en Miami.

El titular del Tesoro estadounidense dijo que la aprobación por parte del Congreso del acuerdo comercial con Colombia «fortalecerá la democracia en América Latina al demostrar el apoyo a una aliado clave, que ha logrado avances significativos en combatir la violencia y la inestabilidad».

El presidente estadounidense, George W. Bush, envió este lunes al Congreso, controlado por la oposición demócrata, el proyecto de TLC con Colombia para su ratificación «urgente» y volvió a reclamar a los legisladores su aprobación.

«La necesidad de este tratado es demasiado urgente, los desafí­os para nuestra seguridad nacional son demasiado elevados para dejar que este año acabe sin que haya una votación», advirtió Bush, al reiterar la importancia de un acuerdo firmado hace más de un año por ambos gobiernos.

El pedido de Bush no fue bien recibido por la mayorí­a demócrata, que controla ambas Cámaras del Congreso.

El jefe de la mayorí­a en el Senado, Harry Reid, calificó de «gran error» la decisión «unilateral» de la Casa Blanca de enviar el TLC con Colombia al Congreso para forzar su ratificación.

Paulson admitió que para el Congreso no es un asunto «fácil» aprobar un tratado comercial de este tipo. «Sabemos de qué forma estos acuerdos son combatidos, pero también sabemos los beneficios a largo plazo que generan a la población» de ambos paí­ses, añadió.

«Una de las más preocupantes tendencias que veo en Estados Unidos es una inclinación contra la apertura, un deseo de retirarse de los mercados mundiales», alertó.

«Tenemos que ver cómo lidiar con las pérdidas de empleos que se derivan del comercio, y asegurarnos de que no nos volvamos aislacionistas», agregó en un claro mensaje a los legisladores estadounidenses.

El funcionario –al igual que lo habí­a hecho un dí­a antes el secretario de Comercio, Carlos Gutierrez–, reiteró así­ el insistente pedido de la administración Bush al Congreso, y subrayó que el gobierno colombiano del presidente Alvaro Uribe «ha tenido éxito en transformar su paí­s en uno de los más estables y en una de las democracias más fuertes de la región».

El secretario del Tesoro norteamericano recordó que en diciembre el Congreso estadounidense aprobó un acuerdo de libre comercio con Perú y señaló: «Es básicamente el mismo acuerdo que hemos logrado con Colombia».

El domingo Gutierrez reclamó también en la asamblea anual del BID que el Congreso estadounidense apruebe el TLC con Colombia, «probablemente el más simbólico» de los tres pendientes de aprobación, por encima de los acuerdos con Panamá y Corea del Sur, dijo.

Por su parte, el ministro de Economí­a de Colombia, Oscar Iván Zuluaga, dijo confiar en que el Congreso estadounidense apruebe el TLC pese a las dificultades que afronta el gobierno de Bush en tal sentido.

«Estamos concentrados en que el Congreso de los Estados Unidos apruebe el Tratado de Libre Comercio, y tenemos la confianza y el optimismo de que se va a lograr ese objetivo», dijo Zuluaga en la asamblea del BID.

El gobierno norteamericano ha multiplicado desde el año pasado sus esfuerzos en favor del TLC y ha desarrollado una intensa campaña en base a la idea de que Colombia es el principal aliado de Estados Unidos en la región.

Sin embargo, no ha logrado convencer a la mayorí­a demócrata que controla el legislativo y que señala que no dará su apoyo al acuerdo hasta que Colombia logre más progresos en materia de protección de sindicalistas y en la investigación de las relaciones entre autoridades del gobierno y legisladores con los paramilitares de extrema derecha.

El gobierno norteamericano ha multiplicado desde el año pasado sus esfuerzos en favor del TLC y ha desarrollado una intensa campaña en base a la idea de que Colombia es el principal aliado de Estados Unidos en la región.