La Policía Federal brasileña detuvo ayer a un joven de 22 años acusado de comandar una red de venta de títulos universitarios falsos en todo el país, informó el organismo policial.
¿Cinco, ocho, diez años de estudios? Todo eso podía ser evadido con un clic en Internet y poco más de mil dólares en promedio, lo único necesario para conseguir un diploma igualito al real, de médico, abogado o ingeniero, según la información de la Policía.
La venta de los diplomas universitarios falsos era hecha a través de un foro de discusiones en la red Internet. Los diplomas eran producidos en una ciudad del interior del Estado de Mato Grosso, y, posteriormente, enviados por el correo rápido.
El comisario Marco Aurelio Faveri, encargado de la operación, dijo a periodistas que quien compró certificados falsos puede ser detenido: «esas personas serán detenidas si son encontradas en flagrante actuando en la profesión respectiva», dijo.
Según Globo, la policía localizó a una mujer que había comprado uno de los diplomas, de medicina, y que ejercía la profesión.
Había títulos que incluso tenían el sello del ministerio de Educación, según la prensa en el lugar. La policía buscaba este viernes a por lo menos 34 compradores en 14 estados brasileños.