El presidente mexicano Felipe Calderón afirmó ayer en Los íngeles (California, oeste de Estados Unidos) que no busca la privatización de la petrolera estatal Pemex y enumeró tres opciones para mejorar el rendimiento de un país «con mucho petróleo» pero de difícil extracción.
«Esa es mi convicción, de manera que, de ninguna manera habrá una privatización y ese es el punto de esto. Sí buscamos fortalecer a Pemex», dijo el presidente Calderón en una conferencia de prensa en un hotel del centro de Los íngeles antes de partir a Ciudad de México tras una gira por Estados Unidos de casi una semana.
En momentos que una reforma energética está en el ojo del huracán político en México, el mandatario aclaró: «No abordé el tema de la reforma energética en la reunión que tuve en Nueva York con la Reserva Federal (del Estado), básicamente la conversación se centró precisamente en el segundo tema de la situación energética».
«Desconocen mi posición acerca de este tema» -agregó Calderón-, «pienso que los mexicanos tenemos que abrir, hacer un diagnóstico objetivo y ponderado de la situación en el sector energético y, concretamente, de Petróleos Mexicanos. Y eso corresponde a los mexicanos, y exclusivamente a nosotros decidir», apuntó.
Pemex, la principal empresa de México que aporta alrededor del 40% de los ingresos fiscales del país latinoamericano, es según el líder de la oposición mexicana Andrés Manuel López Obrador (de izquierda) objetivo de un plan de privatización del gobernante Partido Acción Nacional (derecha) que incluye la bursatilización de la acciones y la inversión extranjera en refinerías.
Calderón respondió: «Hemos sido muy claros en este punto y reiterativos, y seguiremos siéndolo y nuestro propósito es fortalecer a Petróleos Mexicanos para que siga siendo siempre una empresa de los mexicanos y del Gobierno de México».
Las tres opciones mencionadas por el mandatario son: «Una, es quedarnos como estamos, y si esa es la decisión del Congreso, yo la respetaré plenamente»; «la segunda es destinarle más recursos a Pemex del Presupuesto Federal, ya lo hemos hecho con la Reforma Fiscal, sin embargo no ha sido suficiente».
Y «la tercera opción es ver qué han hecho otras empresas públicas en el mundo, digo empresas públicas porque yo tengo la firme convicción de que Pemex tiene que seguir y seguirá siendo del Gobierno y de los mexicanos, exclusivamente».
Ayer, la secretaria de Energía, Georgina Kessel, explicó al noticiero Primero Noticias de México, que las autoridades prevén presentar a finales de marzo una reforma energética y entre las opciones que exploran para Pemex está la que utiliza Cuba en exploración y extracción de crudo, informó la secretaría de Energía.
«En la Cuba de (Fidel) Castro está PDVSA (Venezuela), Repsol (España), además de dos empresas canadienses y recientemente se firmó un convenio con Petrobras (Brasil). Yo creo que es hacia donde se está moviendo el mundo, ahora, no necesariamente en términos de producción compartida», porque México estaría compartiendo el petróleo y eso no es necesario, añadió.
México, que figura en el séptimo lugar entre los exportadores de crudo, produjo 3 millones 82 mil barriles diarios en 2007, un 5,3% menos que en 2006, debido a factores climáticos y al menor rendimiento de su principal yacimiento.