Cuando se llega al poder producto de una guerra interna, el nuevo gobierno se afianza usando simultáneamente varias estrategias, entre las que podemos mencionar el populismo y el terror, pero lo que se reparte con medidas populistas, no es eterno y algún día no muy lejano se acaba y surgen inconformidades, pues hay algunos que quieren más, pues creían que al quitarle a los ricos, pronto ellos se convertirían en los nuevos ricos, sueño que nunca verán realizado.
Mientras se está en el período de repartición, se usa el terror para demostrar quien es el que manda, creando mecanismos de control, tal como usa el partido comunista, similar al que usaba el PRI en México.
A pesar de las medidas populistas, del terror y de los mecanismos del control, se llega a un punto de desgaste que pareciera que se pierde control y popularidad, entonces se empieza a idear nuevos mecanismos que justifiquen la fuerza, tales como crear mitos o si fuera necesario una guerra contra alguien, no importa quien sea pero mejor si es con alguien que aglutine la opinión de la población.
Como ejemplo tenemos a Cuba, que a la par de declarar una guerra contra el imperialismo creó el mito que la revolución había mejorado el alfabetismo y la salud, siendo la realidad que antes de la revolución Cuba era el país más alfabetizado de América.
Ortega en Nicaragua tuvo una guerra, pero no fue con otro país sino que con un grupo de nicaragí¼enses llamados «Contras» y cometió el error de querer jugar a ser democrático, siendo derrotado en las elecciones por Violeta Chamorro.
A Hugo Chávez, a pesar de ser un presidente de un país multimillonario, su populismo no ha sido suficiente para ejercer el control absoluto y queriendo afianzarse en forma supuestamente legal, se llevó a cabo un plebiscito con dos opciones, si y no, lo que le valió su primera derrota y una reprimenda de su comandante y amigo, que le dijo que en Cuba hay elecciones y que nunca se pierde, porque al pueblo sólo se le debe dejar más de una opción y una sola respuesta, que sería el si, y que habiendo una sola respuesta la mesa sólo tendría una representación. Y continúa su comandante y amigo, «El único camino que te queda es el de la guerra». Anteriormente Chávez probó haciendo una guerra verbal contra los Estados Unidos, pero como no le pusieron coco, la única y mejor opción que le queda ahora es una guerra con Colombia, la cual ha tratado de llevar a cabo, llegando hasta insultar a su presidente, pero el presidente Uribe astutamente no ha caído en la trampa, por lo que el siguiente intento sería iniciar incursiones en la frontera con Colombia, para que el ejército de este país responda y así iniciar la guerra y completar su consolidación.
Para los incautos que creen que Chávez se está armando para contrarrestar un ataque de los Estados Unidos, viven en otro planeta, pues acuérdese de la guerra en Irak, donde los cientos de aviones rusos que tenía ese país, despegaron de sus bases aéreas, pero no para hacer frente a los aviones gringos, sino que los pilotos se fueron huyendo a Irán para salvar sus vidas. Con esta explicación creo que ya se imagina para que se está armando Chávez.