Los altos í­ndices de criminalidad y el cambio en las regulaciones fiscales son factores que desmotivan la actividad comercial y la inversión extranjera en el paí­s.

Carolina Castellanos, directora ejecutiva de la Cámara de Comercio Guatemalteco-Americana (AmCham, por sus siglas en inglés), estima que las perspectivas económicas para el 2008 son inciertas, ya que aún se desconocen los proyectos y programas que implementará el nuevo gobierno para los sectores productivos.

Sin embargo, el sector empresarial tiene bien definidos los puntos que le interesan para mejorar sus condiciones de competitividad en el paí­s. La reducción de la violencia social y la estabilidad fiscal, son los temas que encabezan la agenda de discusión con el presidente ílvaro Colom y su equipo de trabajo.

Roberto Ardón, director del Comité Coordinador de Asociaciones Comerciales, Industriales, y Financieras (CACIF) asegura que la reducción de la violencia beneficiarí­a a toda la población, mientras que para los sectores productivos serí­a una motivación más para invertir y expandir sus operaciones, además de aumentar los atractivos para la inversión extranjera.

«Apoyamos las medidas que implementa el nuevo gobierno para reducir la criminalidad y violencia, que tienen oprimida a la población. Los esfuerzos concretos que se realizan son importantes para el bienestar social», indicó Ardón.

Polí­tica fiscal

Además de la violencia, el CACIF requiere de la implementación de una polí­tica fiscal estable que no sea afectada por presiones externas, y garantice al empresariado que no se requerirá de más tributaciones para participar en la actividad económica nacional.

El último desacuerdo del sector empresarial organizado con el presidente Colom, fue el visto bueno que éste le dio a la extensión durante el 2008 al Impuesto Extraordinario y Temporal de Apoyo a los Acuerdos de Paz, a finales del año pasado.

La postura del mandatario fue constante, ya que sin la extensión al IETAAP serí­a difí­cil llevar a cabo los proyectos propuestos en su plan de trabajo, mientras que los empresarios argumentaron que el impuesto se encuentra fuera del contexto nacional.

Apoyan el diálogo

Las discordancias de los sectores productivos y el Gobierno serí­an resueltas, según la polí­tica de Colom, en un diálogo en el que participarán los representantes del comercio nacional e internacional, además de los funcionarios del Gobierno.

Carlos Amador, vicepresidente de la Asociación Guatemalteca de Exportadores, indicó que estarán dispuestos a dialogar y aprobar las polí­ticas más convenientes para el paí­s, a través del Pacto Fiscal.

Esperamos que todos los sectores involucrados participen en un diálogo nacional y se tomen decisiones concretas para mejorar la recaudación, afirmó Amador.

«No se trata de que los empresarios paguen más impuestos, sino de que, los que no pagan, sean investigados y cumplan con sus compromisos», aseguró Castellanos.