Los viejos soldados nunca mueren


Sylvester Stallone posa frente a un afiche promocional del filme John Rambo, en el estadio Santiago Bernabéu de Madrid.

El regreso de John Rambo -héroe de acción í­cono de la década de 1980, cuyo ascenso coincidió con los últimos años de la Guerra Frí­a- es la prueba de que en Hollywood los viejos soldados nunca mueren… solo hacen secuelas.


Rambo se encuentra en el segundo lugar de las taquillas.

Y cuando el condecorado veterano de Vietnam volvió a los cines estadounidenses el viernes en medio de una lluvia de disparos -26 años después de debutar en «First Blood»- el más sorprendido era el actor que lo encarna, Sylvester Stallone.

Stallone, de 61 años, reveló en una entrevista que nunca imaginó que el personaje de Rambo protagonizara una de las franquicias cinematográficas más conocidas de la historia, con ganancias de 600 millones de dólares y tres secuelas.

«Cuando hice «First Blood» en 1982 no tení­a idea que estarí­a 26 años después con la tercera secuela», contó Stallone.

«Originalmente pensé que «First Blood» era una buena pelí­cula de acción que podrí­a ser popular con veteranos de guerra y algunos fanáticos de las pelí­culas de acción pero no tení­a idea que se convertirí­a en un fenómeno mundial», indicó.

«El primer guión que vi estuvo cerca de ser realizado por Steve McQueen, Al Pacino, Gene Hackman y cualquier estrella de acción de la época», recordó Stallone.

Aunque Rambo comenzó como un personaje angustiado y sensible torturado por la experiencia de Vietnam, Stallone indicó que la última pelí­cula sigue la lí­nea de las secuelas, en las que es un musculoso ejército de una persona.

«Reescribí­ el guión (de First Blood) para darle al personaje de Rambo un poco de humanidad. Ahora simplemente está furioso con el mundo y quiere justicia», afirmó Stallone.

Aunque el personaje de Rambo perdió sentido con el fin de la Guerra Frí­a, Stallone indicó que comenzó a pensar en revivirlo cuando sacó de su retiro a otro de sus héroes, el boxeador Rocky Balboa, en la pelí­cula del mismo nombre, en 2006.

«Tuve la idea para «Rambo» cuando entrenaba para «Rocky Balboa»», recordó Stallone. «Me imaginé que si me estaba poniendo en forma para uno, por qué no para el otro».

«Para mí­ ambos personajes son un hombre cualquiera promedio en mundos diferentes. Uno usa un sombrero raro, el otro una bandana, y ninguno habla mucho, pero ambos se comunican bien a través de sus acciones», añadió.

¿Stallone tiene otros personajes que quisiera revivir?

«Tengo muchos personajes a los que me gustarí­a matar y enterrar como el juez Dredd o «Judge Dreadful» como llamo a la pelí­cula», responde, en referencia al criticado filme de ciencia ficción de 1995.

Con el tiempo, Stallone asegura que comprende mejor las crí­ticas que sufrieron muchas de sus pelí­culas.

Pero Stallone igual cree que algunos de sus filmes nunca obtuvieron el reconocimiento que merecí­an, como su «Night Hawks» (1981), en el que se pone en la piel de un policí­a neoyorquino luchando con un cerebro terrorista internacional.

«La pelí­cula salió 20 años antes del 9/11 y ningún estudio ha hecho una pelí­cula sobre terrorismo tan real y que dé tanto miedo como ese filme», dijo Stallone.

El actor, que dirigió a John Travolta en «Staying Alive», en 1983, indicó que ahora planea dedicarse a la realización de pelí­culas: «Quiero dirigir dramas reconfortantes o una comedia poco convencional como la que hice con John Landis, «Oscar». Quiero traer pequeñas historias humanas de vuelta a Hollywood».