Argentina adjudica tren de alta velocidad a empresa francesa


Cristina Fernández de Kirchner (I), presidenta argentina, logró el contrato con Alstom, para que éste construyera un tren de alta velocidad, el primero de Latinoamérica.

La presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, anunció ayer la adjudicación al grupo francés Alstom de la construcción del primer tren de alta velocidad de América latina, que unirá Buenos Aires y Córdoba (700 km al noroeste) y demandará unos 1 mil 300 millones de dólares.


En el acto en la Casa Rosada (gobierno) estuvo presente el secretario de Transportes de Francia, Dominique Bussereau, y representantes del consorcio Veloxia, que Alstom lidera e integra junto a la española Isolux y las argentinas IECSA (constructora) y EMEPA, especializada en material ferroviario.

El tren deberá estar operativo en 36 meses y recorrerá el tramo Buenos Aires-Rosario-Córdoba.

Así­ conectará las tres ciudades argentinas más populosas, ejes de la mayor actividad industrial, agraria y de servicios del paí­s.

«No sólo se trata de una obra pública con altí­sima tecnologí­a, sino que estamos dando un salto importante a una modernidad diferente», dijo la mandataria durante el acto, en el que pidió a los argentinos tener más optimismo y fe en sus propias potencialidades.

De su lado, Bussereau dijo: «El TGV (por su sigla en francés) es el modo de transporte del futuro y ustedes (argentinos) serán una vidriera de las mejores tecnologí­as del mundo gracias a este primer tren de alta velocidad en América latina».

El secretario francés de Transporte insistió en que se trata «de un proyecto conjunto (entre Argentina y Francia) al servicio de Argentina».

Según el proyecto de licitación, en el que Alstom terminó como único grupo en carrera, la obra constará de dos tramos, uno entre Buenos Aires y Rosario (310 km al norte) donde se prevé una doble ví­a y velocidades de entre 250 y 300 km/h.

En el tramo final a la ciudad de Córdoba (capital de la provincia homónima) el tren correrá sobre una ví­a sencilla a 160 km por hora.

La obra permitirá reducir el viaje entre Buenos Aires y Córdoba de las 14 horas actuales a menos de tres. El esquema de servicio prevé la puesta en funcionamiento de hasta ocho trenes de doble piso por dí­a.

La obra, cuyo financiamiento estará asegurado por el banco francés Société Générale, demandará unos 5 mil puestos de trabajo directos y otros 20 mil indirectos en la etapa de construcción.

El grupo Alstom fue el único oferente que persistió en el proceso licitatorio iniciado en mayo de 2006, luego del retiro del consorcio de las españolas CAF y OHL y de la alemana Siemens.

Del acto participaron también el secretario de Transportes, Ricardo Jaime, y los gobernadores Juan Schiaretti (Córdoba) y Hermes Binner (Santa Fe).

El gobierno de Cristina Kirchner –al igual que el de su esposo y antecesor, Néstor Kirchner– pretende relanzar la red ferroviaria, que sufrió un proceso de desmantelamiento durante la década del 90.

Otros dos proyectos para la construcción de trenes de alta velocidad aguardan en carpeta.

Se trata del que unirá la capital argentina con la ciudad balnearia de Mar del Plata (400 km al sur) en la costa Atlántica, y otro para conectar Buenos Aires y Mendoza, situada mil km al oeste, al pie de la Cordillera de los Andes.