El escultor francés Daniel Buren se plantea la destrucción de su más célebre obra, las «Columnas» del Palais Royal de Parí­s, por considerar que su estado de degradación, al no haber sido restaurada durante años, hace que esté ya «medio destruida».

«Miles de personas vienen del mundo entero para ver algo que está medio destruido», lamenta Daniel Buren que, en declaraciones en Parí­s, denunció el fin de semana el estado de abandono de su obra.

Daniel Buren es un artista acostumbrado a las crí­ticas, contra las que «está blindado», declaró él mismo recientemente, al ser inaugurada en Bilbao su última obra, «Arcs rouges», un gran arco rojo sobre el puente de la Salve, frente al museo Guggenheim de la ciudad vasca.

Sin duda la más fuerte polémica que haya acompañado una de sus obras fue la instalación, en 1986, de las hoy famosas columnas en el patio de honor de este palacio del siglo XVII.

Ese edificio fue construido para el cardenal Richelieu y fue residencia de Ana de Austria, madre de Luis XIV y reina-regenta de Francia; actualmente es la sede del ministerio de Cultura y del Consejo de Estado francés.

Con los años, la polémica se calmó y la obra, una instalación de 3 mil m2 con columnas de granito de franjas blancas y obscuras y de altura diferente, fue adoptada por parisinos y turistas e integrada al patrimonio de Parí­s.

Hoy, su autor considera que la obra es ví­ctima «de una forma de vandalismo, pero de un vandalismo de Estado», y ante tal situación estima que hay sólo «dos soluciones» posibles.

«La más satisfactoria, serí­a devolverle su estado original, como se limpia una fuente y vuelve a ponerse en marcha. De lo contrario, se decide que no se quiere restaurarla y yo no puedo aceptar que se la deje en el estado en que está. En tal caso, es necesario demolerla y rehacer todo el patio», declaró Buren.

El escultor explicó que «desde hace ocho años no hay agua en la instalación, demasiado tiempo para una pieza que reposa por lo menos en un 50% en su aspecto de fuente». «Tampoco hay electricidad», agregó.

Según el artista, no se ha realizado ninguna restauración consecuente de la obra pese a sus múltiples gestiones para reclamar que se devuelva a las columnas su aspecto original.

«Me bato desde hace años, pero he visto la obra degradarse ministro tras ministro» de Cultura, agregó. Se realizaron estudios precisos para la restauración, «pero nunca se hizo lo necesario», denunció el artista para explicar por qué se plantea ahora la demolición de las Columnas.

Consultado al respecto, el ministerio francés de Cultura indicó que una renovación de las Columnas de Buren «está programada, pero en el marco de un conjunto de restauraciones importantes de todo el Palacio Real» que se prolongará hasta 2011.

Según Michel Clément, director de arquitectura y patrimonio del ministerio, una sala de ensayos para la aledaña Comedie Franí§aise, el teatro nacional francés, está siendo construida bajo el patio de honor.

Las obras concernerán después la impermeabilización de la superficie en la que se encuentran las columnas y luego será restaurada la instalación.

Clément estimó que dicha restauración de las Columnas podrí­a realizarse «en 2009». El costo total de los trabajos de restauración se estima en 14 millones de euros, de los cuales 3,2 millones para el patio de honor, incluyendo las Columnas.

El funcionario precisó que está prevista una próxima reunión con participación de Daniel Buren y de la ministra de Cultura, Christine Albanel, para examinar el proyecto.