Es lamentable que pese a los esfuerzos de las autoridades en combatir a bandas de delincuentes, estos sigan siendo un cáncer para la sociedad, ya que datos demuestran que diariamente en nuestro país mueren alrededor de 19 personas por los hechos de violencia.
Sin embargo, algunas de las principales preguntas que se hacen los guatemaltecos en su diario vivir son: ¿Dónde está la seguridad para los que vivimos en este país? ¿Acaso no tenemos derecho de vivir en paz?
Tantos son los actos ilícitos que enlutan a cientos de guatemaltecos y no digamos a los que también nos visitan, quienes de alguna manera suelen ser afectados, ya sea porque los asaltan o pasen por una experiencia a la que muchos de los guatemaltecos ya estamos acostumbrados: a que se nos despojen de nuestras pertenencias.
Autoridades van y vienen, pero esta situación es peor cada día. Lo que se necesita es combatir el crimen, con prevención; no sólo persiguiendo a grupos de delincuentes a quienes nunca van a encontrar ni a llevar a juicio, pues las víctimas no se atreven a acusarlos.
¿Qué propuestas concretas tendrán las próximas autoridades para combatir este problema, cuya verdadera raíz se encuentra en los altos niveles de desempleo, ignorancia, pobreza, falta de educación, hambre, etcétera?
Sin dejar de mencionar también la poca cultura que nosotros los guatemaltecos tenemos al acercarnos a observar los cadáveres, que han sido torturados, acribillados y que a sus asesinos se les haya ocurrido abandonarlos a la orilla de una carretera.
Son cuadros impresionantes que se ven cada día. En donde son tomados como un espectáculo que se repite y es contemplado por los curiosos que se acercan, entre ellos niños y niñas que, en su fresca exploración del mundo, asimilan esta violencia como un hecho común y corriente.