A pesar de que muchos bloquean mis pasos, yo continúo el camino de éxito que he emprendido, porque quiero llegar al final.

En la orilla de este sendero hay gente que me critica y calumnia, o se rí­e de mí­; pero yo me imagino que son vivas y aplausos, y sigo adelante.

A veces encuentro enormes obstáculos, cada uno más grande que el anterior, que me impiden la marcha; sin embargo, nada es capaz de detenerme.

Como humano, quisiera hacer una pausa, tomar una atajo o correr locamente, pero sólo son unas tentaciones momentáneas, propias de todo peleador.

Cuando tropiezo, me detengo un momento; pero luego respiro profundo y me lanzo con mayor entusiasmo.

¡Llegaré a la meta porque, nací­ para ser Campeón de Campeones!