Recorriendo el Palacio Real


Eswin Quiñónez
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Es una edificación emblemática. Su arquitectura data del siglo XVII en el reinado de Felipe IV. Los turistas toman el punto como una fotografí­a obligatoria de llevar a sus respectivos paí­ses, pues además está ubicado en una sección medular de Madrid, es decir, a unas cuantas cuadras de la Puerta del Sol.

Y si con suerte y nueve euros (noventa quetzales) en mano se puede ingresar, presentando todas las identificaciones del caso, a visitar el interior del Palacio de la Zarzuela, de lo contrario conocer lo que hay a su alrededor: la Catedral de Nuestra Señora de Almudena y los Jardines de Sabatini.

La historia actual y la extrema cobertura mediática que tuvo la boda del Prí­ncipe de Asturias con Letizia Ortiz, hizo que todo el mundo conociera lo imponente de la estructura de cuatro siglos de historia.

En él vive don Juan Carlos I y toda la familia real. Residen en el tercer piso de los tres que tiene su hogar. No tienen que preocuparse de los vecinos, pues en el área circundante no hay más que jardines y parques. El Rey tiene su despacho en el segundo piso donde convergen la biblioteca, el comedor y el apartado para las visitas.

A esta fortaleza entran pocos. A menos que sea invitado especial de la realeza o se le entregue algún reconocimiento se puede ingresar a todo el recinto y si bien le va hasta confirmar esos rumores de que tiene su propia ermita, una zona deportiva y helipuertos.